“Volvimos al desastre de antes donde tenías que dormir en las colas”

“Volvimos al desastre de antes donde tenías que dormir en las colas”

El nuevo esquema de abastecimiento de gasolina, con las modalidades de precio subsidiado y a 0.5 dólares, presenta no pocos obstáculos durante los primeros tres días de su aplicación. El éxito y normalidad de la que habla el Gobierno nacional contrasta con el retorno de las pernoctas y kilométricas colas de vehículos para abastecerse de combustible.

Por Jhoalys Siverio / correodelcaroni.com





A medida que transcurren los días, empeoran las filas de automóviles. Este miércoles 3 de junio, el sector Alta Vista de Puerto Ordaz se convirtió en un estacionamiento de vehículos. Las colas en las estaciones subsidiadas pasaban los seis kilómetros, para abastecerse sólo de 20 litros, y el despacho inició pasado el mediodía. Ni la E/S Orinokia ni la Caura tenían gasolina y hasta esa hora no llegaban las cisternas de Pdvsa.

Hasta el mediodía, estaciones subsidiadas no tenían suministro de gasolina | Foto Noticias PZO

 

En la estación Cachamay, en el sector Castillito, conductores también madrugaron para hacer una fila que llegaba hasta la entrada del antiguo Hotel Venetur. La E/S Mobil I (La Piña), que hasta el martes solo despachó gasolina a quienes tenían salvoconducto, liberó esta limitante.

El mismo caso se dio la E/S Salto Ángel (en la avenida de los Trabajadores) que anteriormente solo despachaba a sectores priorizados. A esta misma bomba fue a la que debieron recurrir los vehículos que hacían cola en Orinokia luego de quedar por fuera 900 carros marcados.

“No hay ninguna solución, volvimos al desastre de antes donde tenías que dormir en las colas y hasta hubo gente que se murió de un infarto. Dentro de poco nos va a tocar echar en las bombas premium o regresa el bachaqueo, porque igual la gente prefiere hacer cola y pagarla a 0.5 dólares, que a 3 o dólares el litro”, manifestó Albert Lara, conductor.

A las 4:00 pm, tanto en la estación de servicio Orinokia como en la Caura, los conductores se alineaban preparándose para el turno de este jueves, correspondiente a los terminales de placa 7 y 8.

“Tengo pensado irme a las 2:00 am, para ver si entro entre los primeros 200 carros y asegurar que vaya a echar gasolina”, dijo Gregorio Medina, a quien le corresponde surtir combustible este jueves.

Hasta ahora, la estación de servicio Trébol, en Unare, mantiene la venta de gasolina a precio subsidiado solo para quienes cuentan con salvoconducto.

Desorganización

La mayoría de las estaciones de servicio con pagos en dólares dejaron de restringir la cantidad de litros a vender y de regirse por el terminal de placa.

Sin embargo, conductores reclamaron que la estación Las Américas mantenga el despacho de gasolina de acuerdo con el cronograma de matrículas.

Las estaciones premium no fueron ajenas a las colas, aunque en menor medida que las subsidiadas. En estas también hubo retrasos con el suministro de combustible por parte de Pdvsa. En la Paseo Caroní II, llegó después de las 2:00 pm y solo pudieron surtir gasolina a 200 vehículos.

Sobre el método de pago, persiste el efectivo, tanto en bolívares como en dólares. Algunas estaciones en San Félix, como Kavanayen (dolarizada), Centurión (subsidiada) y Santa Inés (subsidiada) cuentan con sistema biopago, aunque su uso retrasó el despacho de combustible a los vehículos.