El partido Generación Independiente, detalló mediante un comunicado la grave situación que viven los connacionales que deciden retornas a Venezuela a raíz de la pandemia.
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“Quienes actualmente tienen a su cargo la administración y gerencia de los recursos públicos del país, tienen también en sus manos la responsabilidad de proteger a estos compatriotas, incluso allende los mares. La politización de este forzado regreso es absolutamente condenable. Por ello, GENTE aboga por que de manera altruista y sin cálculos politiqueros, se despeje definitivamente el espacio aéreo venezolano, eliminando trabas burocráticas que rayan en infantilismo, y porque se habiliten (o, se permitan, en casos de ofrecimientos de terceros países) vuelos humanitarios de ingreso o de salida” reza parte del escrito que podrá leer a continuación…
Parte de la diáspora venezolana que se había venido esparciendo por el mundo como consecuencia de la grave crisis humanitaria que inmisericordemente ha azotado al país durante los últimos años, ha decidido regresar a suelo patrio. Ante un hecho de creciente importancia como este, pero que en la práctica ha sido casi invisibilizado por quienes están llamados en primera fila a facilitar dicho retorno y a brindar todo el apoyo posible, GENERACIÓN INDEPENDIENTE (GENTE) desea hacer de conocimiento público sus consideraciones al respecto:
1- Las condiciones que arrojaron a alrededor de cinco millones de connacionales al exterior no han cambiado en lo absoluto. Al contrario; más bien se han agravado. Escasez, hambre y miseria por doquier, inseguridad, pésima prestación de servicios públicos esenciales, colapso del sistema de salud, ausencia de Estado de Derecho, violaciones flagrantes de derechos fundamentales, corrupción, entre otros males y en el contexto de una insufrible hiperinflación que ha terminado de lapidar el aparato productivo nacional, es lo que le espera a esta diáspora repatriada que se ha encontrado, pues, y se seguirá encontrando, con un estado profundizado y agravado de aquellos males que un día pretendió dejar atrás probando suerte en otras latitudes.
2- El regreso a casa se debe, fundamentalmente, a la aparición del fenómeno global que ha impactado al mundo por su letalidad y que aún preocupa por sus impredecibles consecuencias: la pandemia del COVID-19. Sin trabajo y con la amenaza del contagio, en su mayoría, los retornados han venido desde países vecinos de la sub-región andina. Incluso a pie. Pero también han llegado, como han podido, desde otros confines del mundo. Ese regreso, de hecho, ha estado cargado de dramatismo y de injusticias. Y es precisamente en atención a esta cuasi-invisibilidad y calamitosa realidad que enfrentan los que deciden regresar, que GENTE desea hacer un llamado de atención a todos. La diáspora venezolana que hoy regresa al país tiene derechos y merece respeto.
3- Tragedias, accidentes, humillación, malos tratos y hasta xenofobia, en mayor o en menor grado, han afectado a los venezolanos de regreso desde su sitio de partida hasta el ingreso a su país. Las condiciones infrahumanas por las que estos ciudadanos atraviesan a diario, allá y aquí, son bien conocidas. No hace falta reproducir en estas líneas tanto padecimiento. No obstante, se encuentran desasistidos, indefensos, sin ayuda, sin voz y sin una institucionalidad nacional (incluyendo Embajadas y Consulados) confiable a la que puedan acudir siquiera para ser orientados adecuadamente. Ni hablar de programas de reinserción y planes de desarrollo para aprovechar un potencialmente rico recurso humano que ha sido expuesto a una gran diversidad de métodos y culturas socio-laborales. Porque hay que decir que no se trata sólo de que ingresen dignamente, sanos y salvos a Venezuela (libres del contagio covid-19), sino de que puedan también tener aquí nuevas oportunidades de desarrollo para el bienestar de todos. Los distintos niveles de representación del Gobierno interino que preside Juan Guaidó, incluyendo de manera destacada las representaciones diplomáticas (y consulares si las hubiere), deben abocarse resueltamente, de manera más activa y sin ambages, al tratamiento eficaz y efectivo de estos asuntos.
4- Es dentro de ese contexto que GENTE se permite exhortar, en primer lugar, a quienes tienen responsabilidades directas de atención institucional a estos compatriotas para que respondan poniendo en el centro de su esfuerzo la dignidad y los derechos de estos venezolanos. El confinamiento en instalaciones inadecuadas e insalubres, sin una cuidada observancia de protocolos de salud por largos períodos de tiempo y en medio de la consabida insuficiencia de infraestructura y materiales médico-asistenciales, lejos de evitar los temidos contagios virales más bien los potencian. Hay que evitar a todo trance la tragedia de verle de cerca la cara a la muerte en forma masiva, como ha ocurrido en otros lares. Casi todos los recursos con los que cuenta Venezuela para enfrentar ese hipotético y nefasto escenario acusan un marcado déficit. ¡Cuidado!
5- Quienes actualmente tienen a su cargo la administración y gerencia de los recursos públicos del país, tienen también en sus manos la responsabilidad de proteger a estos compatriotas, incluso allende los mares. La politización de este forzado regreso es absolutamente condenable. Por ello, GENTE aboga por que de manera altruista y sin cálculos politiqueros, se despeje definitivamente el espacio aéreo venezolano, eliminando trabas burocráticas que rayan en infantilismo, y porque se habiliten (o, se permitan, en casos de ofrecimientos de terceros países) vuelos humanitarios de ingreso o de salida. Hay casos apremiantes, como en Chile, EE.UU o España, por ejemplo. De esa manera se haría realidad el ahora anhelado regreso a casa en forma segura y en condiciones de dignidad humana.
6- GENTE, asimismo, exhorta a los diversos actores locales, individuales o colectivos, a brindar apoyo en la medida de sus posibilidades a estos connacionales. ONGs, sociedades y asociaciones civiles, partidos políticos y otros, pueden y deben ejercer un acompañamiento efectivo en esta hora menguada para muchos. La indiferencia y sobre todo, cualquier vestigio de xenofobia endógena, si cabe este oxímoron (especie de Hafefobia), deben ser radicalmente apartados del trato que se debe brindar al retornado.
7 Los representantes internacionales de GENTE han sido instruidos y autorizados por el partido para que, en la medida de su posibilidades, brinden -allí donde se encuentren en el exterior, pero también en las áreas fronterizas venezolanas- apoyo, voz y acompañamiento a los venezolanos que han decidido reinsertarse en el país, especialmente cuando se trate de invocar normas de derecho expresamente reconocidas en el sistema legal venezolano y que por lo tanto resultan exigibles.