La cantidad de reclusos de Florida que han muerto por COVID-19 ha aumentado a 21, mientras que casi 1,800 prisioneros han dado positivo por la enfermedad, informó el martes el Departamento de Correcciones de Florida.
No se supo de inmediato qué prisión albergó al preso 21 para morir por complicaciones de COVID-19, la enfermedad respiratoria causada por el coronavirus.
El Departamento de Salud de Florida divulga cada miércoles las cárceles donde han muerto los internos.
La información más actualizada mostró que 19 reclusos habían muerto en ocho cárceles, incluidos siete en la instalación correccional del río Blackwater, tres en la institución correccional Sumter y dos en la institución correccional Dade, la institución correccional Everglades y la institución correccional de la Unión.
Funcionarios correccionales informaron el martes que 1,798 reclusos y 375 trabajadores correccionales habían dado positivo por COVID-19.