Nueve venezolanos emprendieron un viaje desde Santiago de Chile hasta Arica, Perú, luego de que se les cerraran las posibilidades de encontrar empleo con el que mantenerse en el país austral.
Por El Pitazo
Una de las venezolanas del grupo, de 31 años, relató a El Pitazo que desde principios de mayo estuvieron fuera de la Embajada de Venezuela en Chile solicitando ayuda para regresar a su país natal. Después de tres semanas sin respuesta, los trasladaron a un refugio donde recibieron alimentos y techo.
“La meta es Venezuela. Nosotros nos fuimos con un sueño, pero ahora lo que queremos es estar en nuestras casas”, expresó la venezolana, que solicitó resguardar su nombre. Apuntó que todos dieron positivo a la prueba para detectar el COVID-19, por lo que fueron trasladados a hoteles chilenos, donde estuvieron aislados durante 15 días. Recibieron comida y atención médica. Una vez que se recuperaron, se les permitió volver al refugio con una constancia médica que aseguraba que ya no tenían la enfermedad.
Luego de 10 días más en el refugio, el grupo decidió emprender el viaje hacia Perú, por lo que se trasladó hasta el desierto de Atacama, en la región de Arica. Una vez allí, en el cordón sanitario no se les permitió pasar, puesto que no tenían la residencia peruana.