Bien es sabido que dese que nació, todo lo que hace o dice el hijo de Diana de Gales es noticia, pero desde que contrajese matrimonio con Meghan Markle, más todavía, y quizás ese fuera uno de los motivos por el que la pareja decidiese mudarse al otro lado del charco. Sin embargo, su nueva vida en Los Angeles ha llamado la atención de la prensa desde el primer momento debido al “Megxit” y también con la elección de su casa, que finalmente ha sido una fastuosa mansión perteneciente al productor Tyler Perry que consiguieron gracias a Oprah Winfrey, gran amiga de la exactriz.
Por ABC
Ahora el foco de la atención se lo ha llevado el príncipe Harry, que según informan diversos medios británicos, voló a Londres el pasado 20 de junio sin la compañía de su esposa y su hijo. Aunque no está confirmado, todo apunta a que el motivo de su viaje no era otro que realizar ciertos trámites con el visado estadounidense, pues hace ya tres meses que reside allí, y al parecer seguiría utilizando el de turista.
Todo parece bastante normal teniendo en cuenta que está intentando construir una nueva vida en el país americano. Sin embargo, lo que ha desatado la polémica es que para el trayecto, a pesar de ir solo, no prescindiese de un jet privado cuando tanto él como Meghan defienden que hay que evitar este tipo de lujos con el fin de evitar el cambio climático. De hecho, esta no es la primera vez que recibe críticas por este motivo e incluso ha llegado a declarar a la prensa de su país que también coge aviones comerciales y que este tipo de jets los usa en contadas ocasiones.
La aeronave utilizada habría sido el Cessna Citation Sovereign 680, un modelo que ya han empleado en más ocasiones que figura entre los más selectos de su categoría. Con capacidad para 12 personas y un precio que ronda los 20 millones de euros, parece haberse convertido en el medio de transporte favorito del inglés.
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