Primero fue Nicolás Maduro y luego, Manuel Cristopher Figuera, general del Ejército venezolano en el exilio. Ambos han dicho que fichas del régimen venezolano tienen infiltrados a miembros de las Fuerzas Armadas de Colombia.
Por eltiempo.com
Incluso, Jorge Rodríguez, ministro de Comunicaciones del régimen, aseguró que, por esa vía, lograron desarticular la operación de mercenarios contra Maduro (de marzo pasado), bautizada ‘Gedeón’ y calificada por algunos como un fiasco y por otros como un montaje.
En Colombia, el tema de la infiltración ha sido asumido como otro golpe bajo de Maduro para involucrar al país en su conflicto. Pero el caso ha ido tomando vuelo por el supuesto rol que el capturado Álex Saab –agente del régimen y señalado testaferro de Maduro– tendría en esta infiltración. Además, por declaraciones del expresidente Andrés Pastrana.
De hecho, su colega, el expresidente Álvaro Uribe, también se ha referido al supuesto espionaje de agentes de Cuba, y esas afirmaciones tenían inquieta a la inteligencia del Ejército que, en medio de los perfilamientos ilegales, llevaban un expediente sobre este tema llamado ‘Orinoco’ (ver recuadro al final).
Mujer de Maduro, el enlace
En el caso de Saab, la fuente primaria es el general venezolano Figuera, exdirector del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebín).
EL TIEMPO lo ubicó y reveló que tuvo una conexión con Saab, el miércoles 27 de febrero de 2019, a través de la primera dama de Venezuela, Cilia Flores, luego de que al colombiano se le incendiara un depósito con alimentos en el puerto de La Guaira.
“Recibí una llamada por la red social WeChat de Cilia Flores, solicitándome, de parte de Maduro, que mandara un equipo de investigación al puerto, para determinar la causa del incendio en uno de los depósitos del empresario Alex Saab y me envió su contacto. Luego le escribí un mensaje a Maduro para verificar y me contestó ‘Ok’ ”, narra el general.
¦Y agrega que procedió a enviar un equipo de especialistas para que revisaran grabaciones de video y entrevistaran a los presuntos responsables: “Todo lo coordiné con el empresario. Hacia las 2 p. m., Cilia Flores volvió a llamarme, solicitándome un avance de la investigación y a decirme que el presidente estaba muy pendiente. Acto seguido, llamé al empresario Saab, le dije que si creía que el equipo de investigación no estaba haciendo bien el trabajo, que me llamara a mí”.
¿Plan contra expresidentes?
De acuerdo con Figuera, para calmar los ánimos, Saab se puso a sus órdenes.
“Me dijo espontáneamente que tenía muchos contactos con empresarios, banqueros, militares y personas de la inteligencia de Colombia; le pregunté si eran confiables, me respondió que ‘totalmente’. ‘Muy interesante’, le dije. En ese punto me invitó a que nos tomáramos un café y que él me pondría en contacto con ellos. El encuentro nunca se concretó, pero me quedó claro que Saab era uno de los ‘caballos de Troya’ de Maduro”, le explicó Figuera a este diario. Y aseguró que cuando Colombia lo acogió temporalmente, también se lo dijo a las autoridades.
Aunque Figuera no dio nombres ni rangos, porque no se reunió con Saab, tras sus declaraciones el expresidente Andrés Pastrana también habló de la infiltración venezolana.
En recientes declaraciones, Pastrana ha afirmado que, por su importancia, Saab es la ‘joya de la corona’ y que Colombia no debía descartar pedir su extradición, en caso de no ser enviado a Miami. Además, que Maduro tiene infiltrado a cuerpos de inteligencia colombianos.
Y a NTN24 le agregó, citando a Figuera: “Álex Saab era el que tenía a altos generales de la Policía y de la inteligencia colombiana comprados, información que conoce ya el ministro Carlos Holmes Trujillo y no se ha hecho nada”.
‘Una infamia’
Pastrana no ha querido dar detalles de la información que le entregó al ministro. Sin embargo, fuentes cercanas a él dijeron que estaría vinculada a un supuesto plan para atentar contra el expresidente Uribe y contra él. Y aseguran que el nombre del general (r) Juan Carlos Buitrago, oficial que lideró las investigaciones contra Saab, salió a relucir en la conversación con Carlos Holmes Trujillo.
Buitrago rompió su silencio sobre ese tema y le dijo a EL TIEMPO que es una infamia intentar vincularlo con el régimen o con Saab, a quien persiguió junto con la DEA y la CIA.
“Las infamias que me endilgan de tener vínculos con el régimen de Maduro y los cubanos, y de estar dirigiendo un atentado contra un expresidente de la República, financiado por estos dos regímenes, así como de la existencia de generales de la República infiltrados por el Sebín, no solo es ridículo, parece de ciencia ficción, esto no lo cree nadie, ni siquiera el círculo más cercano de quien lo ha denunciado. Tampoco la oposición venezolana y menos autoridades americanas. Estos me conocen, son testigos de excepción y saben que no es cierto. Todo esto está como para una serie de Netflix que titularía ‘asquerosamente irresponsable’, y que más bien busca anular a quienes hemos perseguido frontalmente y sin descanso las mafias del contrabando, el lavado de activos y el régimen de Maduro”, aseguró Buitrago.
Y agregó: “Más grave aún, develaron y expusieron mi identidad, la de un general de la República que ha liderado operaciones de alto riesgo en materia de contrainteligencia de Estado, con información clasificada de ultra secreto y poniendo en peligro mi vida e integridad y la de mi familia, al convertirme en blanco del régimen del vecino país”.
EL TIEMPO le preguntó a la cartera de Defensa sobre el tema, pero al cierre de esta edición no había una respuesta.
Oficiales de inteligencia aseguraron que han expulsado a agentes del régimen que vienen a espiar a Colombia y que, en esa línea de investigación, se están indagando todas las versiones. Por ahora, la extradición de Saab a Estados Unidos sigue su curso desde Cabo Verde.
El caso ‘Orinoco’
El 9 de junio, el senador Álvaro Uribe dejó una constancia ante la plenaria, advirtiendo que su nombre había aparecido en una de las carpetas incautadas en el Batallón de Ciberinteligencia del Ejército.
Además de datos sobre personas cercanas a él, en una de las carpetas reposaba un mensaje que envió por sus redes en el que hablaba de un supuesto espionaje de agentes cubanos, información que, dijo, le había suministrado la oposición venezolana en 2014.
EL TIEMPO estableció que el mensaje de Uribe sobre el presunto espionaje fue guardado en una carpeta marcada con el nombre de ‘Orinoco’. Allí, la inteligencia del Ejército indagaba esas versiones y tenía perfilado a un ciudadano cubano vinculado a diplomáticos y a políticos.
Le habían hecho rastreos en episodios en Estados Unidos, vinculados a Elián González, el célebre balserito cubano. Y tenían documentados intercambios de mensajes sobre temas de Colombia. La carpeta incluye un nutrido organigrama con los contactos de ‘Orinoco’ y con sus actividades en el país.
EL TIEMPO estableció que se trataba de uno de los llamados blancos legítimos, que terminó mezclado con perfilamientos ilegales a periodistas, funcionarios y políticos.