Tras darse a conocer la decisión del TSJ de Maduro sobre la “suspensión, por lapso de noventa (90) días, de la aplicación de cualquier instrumento normativo dictado por los concejos municipales y consejos legislativos de los estados que establezcan algún tipo de tasa o contribución de naturaleza tributaria, así como cualquier decreto o acto administrativo de efectos generales dictado con la misma finalidad, por los alcaldes o gobernadores” los municipalistas de Acción Democrática en Carabobo indicaron que tal “aberración jurídica” supone “el fin de la descentralización administrativa y, a partir de ahora, quien sabe hasta cuándo, los alcaldes y gobernadores pasan a estar pintados en la pared financieramente”.
Así lo expresó Engelbert Rivero, Secretario Seccional de Asuntos Municipales de AD – Carabobo, quien destacó “Ya la Ley Orgánica del Poder Publico Municipal consagra claramente la normativa impositiva que regula cada uno de los impuestos de competencia municipal, Adicionalmente, la Constitución también describe claramente lo relativo a la potestad tributaria de los municipios basándose en la autonomía. Tal parece que el gobierno de facto, ante la imposibilidad de compatibilizar la constitución con su voracidad fiscal, recurre al TSJ para demoler la autonomía financiera local y le da todo el poder impositivo a Tareck El Aissami para que sea el y no la Asamblea Nacional la que resuelva lo adecuado o no de una reforma recentralizadora como la que evidenciamos. Es momento que los actuales gobernadores y alcaldes se pronuncien sobre esta situación que afectará su capacidad y potestad de diseñar sistemas de recaudación que les permita soportar las cargas públicas, y más en estos momentos de severa crisis económica y pandémica”.
Para Julio Castellanos, Subsecretario Seccional de Asuntos Municipales de AD – Carabobo, “Si los alcaldes y gobernadores guardan el vergonzoso silencio al que ya nos tienen acostumbrados la suspensión de la autonomía tributaria constitucional pasará a ser permanente. Si ya estaban pintados en la pared, pasarán a la historia como los últimos alcaldes y los últimos gobernadores de verdad. Esos cargos están siendo vaciados de funciones y con ello pasará al olvido la descentralización y la capacidad de cada ciudad de dirigir su propio rumbo. Atrás quedó el discurso oficialista de la participación ciudadana, la dictadura nos está participando, notificando, que de ahora en adelante todo se resolverá en Caracas, guste o no”.
Nota de prensa