Quizás los estafadores de semillas se ramificaron.
Después de informes en todo el país de misteriosos paquetes de semillas que llegan de China, los residentes de Nueva York a Georgia ahora dicen que están recibiendo otros envíos extraños del país que nunca ordenaron.
El USDA ha comenzado a identificar las semillas no solicitadas enviadas a los Estados Unidos este verano, incluyendo mostaza, repollo y hierbas como la salvia y el romero, que la agencia cree que es parte de lo que se llama una “estafa de cepillado”.
El esquema se basa en “clientes” que reciben productos que nunca ordenaron para que el remitente luego publique una crítica falsa del cliente en su nombre para aumentar las ventas.
Ahora, un afiliado de ABC en Atlanta informa que los residentes han comenzado a recibir todo, desde gafas de sol falsas Rayban hasta silbatos de China.
“No creo que la gente envíe esto de buena voluntad en mi opinión”, dijo Faith Tankersley, quien recibió las gafas de sol sospechosas, a la estación. “Me temo que puede haber algo perjudicial para ellos”.
Otra residente, Kelley Litty, dijo que recibió un paquete chino de máscaras faciales el mes pasado.
“Dice China en la etiqueta de las máscaras. [Estoy] 1,000 por ciento seguro de que no ordené ninguna máscara ”, dijo Litty. “Es una completa sorpresa. Y no tiene sentido “.
En el estado de Nueva York , los residentes del condado de Broome le dijeron a la estación local de CBS / CW que también habían recibido paquetes aleatorios de máscaras faciales. Una residente de Endicott, Dawn Proctor, le dijo a la tienda que recibió lo que parecía ser un paquete de calcetines sucios de China.
“No hay factura adjunta”, dijo Proctor. “No hay nota adjunta. Los calcetines parecían usados. Todos nos reímos de eso. Pensé que era extraño y los tiré ”.
Los funcionarios estadounidenses no han confirmado que ninguno de los informes esté relacionado o que alguno de los nuevos paquetes forme parte de una estafa coordinada.
El USDA ha informado a los residentes que no planten las semillas que recibieron. En cambio, los residentes deben guardar las semillas y su embalaje en el que llegaron y enviarlas a sus funcionarios reguladores de plantas locales para que las prueben