Tarek William Saab, fiscal general del régimen chavista, aprovechó la pandemia de coronavirus para echarle flores a su gestión usurpadora en el Ministerio Público de Maduro.
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“El pasado 5 de agosto nuestro equipo de trabajo cumplió su tercer aniversario. Hemos trabajado constantemente para renovar a una institución que fue llevada por la gestión anterior hasta la ruina moral”, enfatizó en rueda de prensa.
Sostuvo que, durante una década, la institución se dedicó a “extorsionar y tener bufetes para sacar ganancias”. “Acá se banalizó la ley y el estado derecho. Lo que recibimos fue un cascarón podrido”, dramatizó.
Según Saab, han alcanzando logros poco a poco, en procura de la “justicia y una cultura de paz”.
“En estos 3 años ingresaron 1 millón 203 mil 255 casos y han egresado 769 mil 747. Se realizaron 2 millones 337 mil 321 actuaciones, se presentaron 527 mil 231 actos conclusivos y 158 mil 426 acusaciones; además de obtenerse condenas contra 56 mil 735 personas”, aseguró.
Saab consideró que algo que ha caracterizado a su gestión ha sido “la lucha contra la corrupción” en todas su formas, tanto en lo interno como en lo externo.
“A pesar de la situación de pandemia que se vive en el mundo, los criminales no se detienen y es necesario felicitar la actuación del Estado venezolano como un todo; que afronta además las sanciones y el bloqueo”, finalizó.
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