En 1803, los habitantes de Hitachinokuni vieron cómo un vehículo extraño descendía sobre sus costas. Al principio se paralizaron por el miedo, pero luego se encontraron con una sorpresa: del objeto emergió la mujer más bella que hayan conocido hasta ese momento. Según los datos históricos, la dama del platillo volador era una joven de tez blanca, con cabello rojo y un hermoso vestuario.
Por: History Channel
La leyenda afirma que, luego de ese episodio, nadie pudo comunicarse ya que hablaba una lengua inentendible. Esto datos son eje de varios relatos del período Edo en Japón, y marcaron a fuego el imaginario popular. La historia se bautizó como el “extraño caso del Utsurobune de Hitachinokuni”, siendo interpretado como el primer avistamiento de Ovnis en Japón.
Hasta el momento, se encontraron once tipos de documentos que mencionan similitudes a la leyenda de Hitachinokuni; dos de ellos fueron tomados el mismo año del avistamiento. El investigador Tanaka Kazuo asegura que “resulta extraño que todos los documentos describan y representen en imágenes concretas la forma de disco del vehículo. Da la sensación de estar basado en un hecho real”.
Tanto la ropa de la mujer, como la forma de disco y el tamaño de vehículo, suelen variar según el documento que se analice. En algunos escritos, por ejemplo, el vehículo medía unos 3,3 metros y 5,4 metros de ancho; el chasis estaba compuesto de hierro y palisandro, y poseía ventanas de cristal.
“No sé si ese texto es un documento oficial o no. Han sobrevivido dos volúmenes, en total, pero salvo la historia del Utsurobune el resto son todos incidentes reales. Por lo menos debemos considerar que la persona que registró la leyenda consideraba que la nave existió de verdad”, concluyó Tanaka. A partir de esos relatos, se podría afirmar que el primer avistamiento de Ovnis sucedió en Japón.
