Un hombre de 52 años falleció el pasado 4 de agosto en los Alpes franceses, donde se encontraba con su familia de vacaciones, tras ser picado en la lengua por una avispa.
El hombre estaba comiendo cuando recibió la picadura, que le provocó una inflamación de la lengua y asfixia hasta perder el conocimiento. Los servicios de emergencia desplazados al lugar no lograron reanimar a la víctima, que falleció a causa de un paro cardiorrespiratorio.
La prensa francesa señala que la mayoría de las muertes de este tipo ocurren tras múltiples picaduras de avispas o como consecuencia de una alergia al veneno del insecto, pero a veces una sola picadura en una membrana mucosa, sobre todo dentro de la boca, es suficiente para tener consecuencias fatales.
Con todo, el número de fallecimientos por picadura de abeja, avispa y avispón sigue siendo muy bajo. Por ejemplo, en EE.UU. se produce un promedio de alrededor de 60 muertes al año, mientras que en el mismo periodo en España unas 4 o 5 personas pierden la vida por culpa de estos insectos.