Mediante un comunicado, Vente Venezuela en el estado Guárico rechaza este jueves la detención de Juan Carlos Valera, directivo de esa organización en el municipio José Félix Ribas, por señalar las irregularidades en el suministro de combustibles en Tucupido. Así, el partido expresa su respaldo a él y a todos los ciudadanos que denuncian la corrupción en el suministro de combustibles, comandada por funcionarios de la Guardia Nacional.
“La corrupción dentro de la Guardia Nacional y en los demás componentes de la Fuerza Armada Nacional es uno de los tantos elementos probatorios de que en Venezuela se ha configurado un Estado criminal, que ha ocasionado la peor crisis humanitaria compleja en la historia de América Latina. Un Estado criminal compuesto por mafias que destruyeron todo el aparato productivo del país y que hoy controlan lo poco que aún queda, como los combustibles”, reza el texto.
En ese sentido, reiteran su llamado a construir una coalición internacional liberadora para poner fin al Estado criminal. “Un régimen que apresa a ciudadanos que exigen sus derechos en una fila de gasolina no entregará el poder mediante elecciones ni mediante diálogos”, plantean.
A continuación, y en adjunto, el texto en su integridad:
Vente Venezuela en Guárico respalda a ciudadanos que denuncian corrupción de la Guardia con la gasolina
Desde de Vente Venezuela en el estado Guárico denunciamos ante la opinión pública nacional e internacional la arbitraria detención y la posterior liberación bajo régimen de presentación ante los tribunales de Juan Carlos Valera, miembro de la Dirección Ejecutiva de nuestra organización en el municipio José Félix Ribas. Juan Carlos alzó su voz ante la corrupción promovida y comandada por funcionarios de la Guardia Nacional en las estaciones de servicio de combustible.
El pasado viernes 7 de agosto llegó una gandola de gasolina a la estación de servicios Los Llanos, en Tucupido, cuestión que motivó a los ciudadanos a formar una larga fila de vehículos para surtir combustible. En horas de la tarde, el teniente de la Guardia Nacional Tovar Ponciano y un sargento de apellido Sandoval ordenaron la disolución de la fila y anunciaron a los ciudadanos la prohibición de la venta de gasolina para todos, a excepción de los “sectores prioritarios”. Esto causó indignación en los ciudadanos, quienes se negaron a deshacer la fila y expresaron al teniente las consabidas irregularidades que se cometen en las estaciones de servicio, donde los mismos funcionarios de la Guardia Nacional privilegian a algunos ciudadanos en la obtención de combustible a cambio de cantidades de dinero en divisas. Esta fue la razón por la que el teniente ordenó la detención de Juan Carlos y otro ciudadano. Ambos fueron inmediatamente presentados a fiscalía; permanecieron dos días detenidos en el destacamento de la Guardia Nacional en Tucupido, en condiciones totalmente inhumanas; y fueron liberados bajo régimen de presentación con los cargos de instigación al odio, desorden público y resistencia a la autoridad.
Rechazamos de manera categórica los atropellos contra Juan Carlos Valera y los ciudadanos de Tucupido. Es una situación que se vive día a día en todas las estaciones de servicio del estado Guárico, como en todo el territorio nacional. Repudiamos la corrupción comandada por muchos integrantes de la Guardia Nacional, no solo en las estaciones de servicio, sino también en los demás espacios donde tienen control.
La corrupción dentro de la Guardia Nacional y en los demás componentes de la Fuerza Armada Nacional es uno de los tantos elementos probatorios de que en Venezuela se ha configurado un Estado criminal, que ha ocasionado la peor crisis humanitaria compleja en la historia de América Latina. Un Estado criminal compuesto por mafias que destruyeron todo el aparato productivo del país y que hoy controlan lo poco que aún queda, como los combustibles.
Respaldamos a nuestro amigo Juan Carlos Valera y a los miles de ciudadanos que día a día alzan su voz, sin miedo, contra los atropellos de un Estado forajido y fallido. La historia los premiará por esa actitud corajuda, que hoy nos hace sentir orgullosos y confiados de que muy pronto lograremos la libertad. Debemos seguir alzando nuestras voces.
Reiteramos a nuestros aliados internacionales la exigencia de avanzar en la construcción de una Operación para la Paz y la Estabilización (OPE), a fin de desalojar al Estado fallido y forajido venezolano mediante el uso de la fuerza. Esto, amparado en principios como el de la Responsabilidad de Proteger de la Organización de las Naciones Unidas y en mecanismos como el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (Tiar).
Un régimen que apresa a ciudadanos que exigen sus derechos en una fila de gasolina no entregará el poder mediante elecciones ni mediante diálogos. Ya los venezolanos hemos agotado esas instancias y seguimos determinados a continuar nuestra lucha, cuyo único objetivo es la libertad.
Nota de prensa