Una maestra de una escuela de formación en Shaoxing, provincia de Zhejiang, en el este de China, se ha convertido involuntariamente en el centro de la controversia después de que cortó una pequeña sección del cabello de un estudiante que tenía chicle pegado, informaron medios locales el domingo.
Por Global Times
Los padres de la niña de 10 años pidieron 20.000 yuanes (2.876 dólares) en compensación a la escuela por cortarse el cabello sin su consentimiento, alegando que el corte de pelo afectaría su negocio familiar, según una tradición local en su ciudad natal que no dieron más detalles.
La maestra, de apellido Wang, explicó que solo quería ayudar con la niña y solo cortar una pequeña parte, lo que la niña le permitió hacer.
Wang dijo que no aceptaría la solicitud de dinero o la exigencia de que pegue con cinta adhesiva el cabello cortado de la niña, pieza por pieza, y que también se corte el cabello y el de otras maestras.
Las demandas de la familia fueron criticadas por los internautas chinos por ser supersticiosas, y algunos lo llamaron “típico chantaje” y dijeron que el caso debería ser llevado a la policía.