Los votantes en el condado de Broward que decidan emitir su voto por correo para las elecciones generales de noviembre tendrán dos docenas de nuevos lugares para dejar sus boletas en medio de preocupaciones sobre posibles retrasos en el Servicio Postal de los Estados Unidos.
Por NBC Miami
El condado anunció el lunes que se colocarán 24 ubicaciones seguras en el área en respuesta a las preguntas de los votantes durante las elecciones primarias que tuvieron lugar a principios de agosto.
“Dada la cantidad de llamadas relacionadas con USPS y las alternativas para la entrega de boletas, era importante notificar al público sobre las opciones disponibles, ya que las boletas se envían por correo entre el 19 de septiembre y el 24 de octubre”, dijo el supervisor de elecciones Peter Antonacci en un comunicado.
La pandemia de coronavirus inspiró a muchos a votar por correo durante las elecciones primarias en Florida. Más de 2,1 millones de personas habían emitido su voto por correo en comparación con menos de 1,3 millones en las primarias de 2016.
A diferencia de 2016, cuando hubo primarias para el Senado de los EEUU que ayudaron a aumentar la participación, no hay contiendas estatales en la boleta electoral de agosto de 2020.
Los trabajadores postales del sur de Florida realizaron una protesta la semana pasada, llamando a los cambios dentro del sistema postal un intento de socavar la entrega de correo con las elecciones de otoño en el horizonte.
Los empleados postales están en desacuerdo con su jefe, el Director General de Correos de EEUU Louis DeJoy, por los esfuerzos que, según él, son para mejorar el servicio. La disputa se produce menos de un mes antes de que las boletas de votación por correo comiencen a enviarse a los votantes del sur de Florida.
Un grupo de trabajadores postales estaba parado afuera de una oficina de correos en el centro de Miami el martes, diciendo que realmente no quieren meterse en política, pero afirman que el hombre que el presidente Donald Trump nombró en junio para dirigir la oficina de correos está haciendo cambios debilitantes que son ya está ralentizando el correo y podría tener un impacto en el recuento de las boletas por correo.
“El servicio postal pertenece al pueblo. Somos los trabajadores postales, pero el servicio postal pertenece al pueblo”, dijo Wanda Harris, presidenta del sindicato de trabajadores postales local.
Un área especial de preocupación expresada por Harris y dos congresistas demócratas, que asistieron a la protesta del martes, son las boletas electorales por correo y que lleguen a tiempo a los departamentos de elecciones este otoño.
“Ayer mismo, en el Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, vimos al Director General de Correos admitir que bajo su liderazgo el servicio se ha retrasado y también admitir que no revertirá ningún cambio y que el daño ya está hecho”, dijo la congresista Debbie Mucarsel-Powell.
El director general de correos Louis DeJoy negó que su voto se ralentice.
“El Servicio Postal tiene la capacidad y el compromiso de entregar el correo electoral de la nación de manera segura y puntual”, dijo DeJoy la semana pasada.