La Unión Europea busca “una mayor eficacia en los retornos” de los migrantes ilegales hacia sus países de origen, indicó este miércoles la comisaria europea para los Asuntos Internos, Ylva Johansson, en una presentación de la reforma de asilo en el bloque.
“Tenemos que concentrarnos más en los retornos (…) En nuestro plan de hoy hay múltiples iniciativas para conseguir una mayor eficacia en los retornos (…) Un punto crucial es, por supuesto, tener buenos acuerdos de readmisión (de estos migrantes) en los países terceros, y es lo que será una prioridad”, insistió Johansson.
Johansson presentó este miércoles el Nuevo Pacto para la Migración y el Asilo, la nueva normativa migratoria del bloque, que fue arduamente negociada durante cinco años y que ya es objeto de críticas.
Por la nueva normativa, todos los países europeos quedan involucrados en hallar soluciones, dependiendo de su peso económico y población,
Sin embargo, podrán elegir entre dar la bienvenida a los solicitantes de asilo, “patrocinar” el regreso a su país de un migrante que no tiene derecho a permanecer en la UE o ayudar a construir centros de recepción.
Por su parte, el vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, dijo que el nuevo conjunto de normas incluye un significativo refuerzo de los controles fronterizos, un reclamo permanente de los países situados en las fronteras externas de la UE.
“En la actualidad, la única obligación para un estado miembro [de la UE] es tomar las huellas dactilares quien llegue irregulamente y registrarlo. Bajo la nueva normativa, todos los recién llegados serán sometidos a intensos chequeos de identidad, seguridad y salud”, dijo el funcionario.
Johansson había dicho en la víspera que no esperaba “aplausos” con la presentación del Pacto, y de hecho las críticas comenzaron a surgir cuando la funcionaria aún hacía uso de la palabra.
Para Marissa Ryan, de la organización humanitaria Oxfam, con su nuevo Pacto la UE “se curvó ante la presión de los países del bloque cuyo único objetivo se disminuir el número de personas que reciben protección en Europa”.
Otro experto en legislación migratoria europea, Francois Gemenne, dijo que el nuevo Pacto era un “balance entre la xenofobia y la cobardía”.
AFP