Donald Trump, con 74 años y bastante pasado de peso, forma parte de la población de alto riesgo, de modo que el médico presidencial, Sean Conley, ha prescrito un aislamiento total y la suspensión de todas las actividades de campaña. Mike Pence y otras figuras del partido los suplirán en los múltiples eventos pautados hasta nuevo aviso.
Por El Político
Pero ¿qué hay si el presidente llega a estar seriamente enfermo? En ese caso el vicepresidente Mike Pence asumiría el cargo el tiempo que fuera necesario según lo establece la 25ava Enmienda de la Constitución. Si el vicepresidente también se enfermara (recordemos que ha estado siempre muy cerca de Trump), ocurriría una crisis constitucional.
Según una regla de 1947 en la Ley de Sucesión Presidencial, la presidencia pasaría temporalmente a Nancy Pelosi en calidad de Speaker of the House, es decir, líder la Cámara Baja del Congreso. Esta transición de republicanos a demócratas sin duda crearía una crisis política, algo que aquellos tratarían de bloquear a toda costa.