El Ford Mustang Boss 429 es una variante de alto rendimiento que fue ofrecida por la marca del óvalo azul en 1969 y 1970 y este ejemplar pareciera haber viajado en el tiempo.
Por: lapatilla.com
Fotos: ultimatecarpage.com
Fue construido principalmente para permitirle a Ford que el nuevo motor de bloque grande “semi-hemi” pudiera ser utilizado en la serie NASCAR.
Las reglas establecían que para que cualquier pieza o motor modificado se considerara legal, tenía que instalarse en al menos 500 autos que fueran vendidos al público.
En total se fabricaron 1.359 unidades del Boss 429 y todas se ensamblaron en las mismas instalaciones de Kar Kraft donde también se habían preparado los GT40 ganadores de Le Mans.
El inmenso motor que generaba 375 caballos de fuerza se acoplaba a una caja manual de 4 velocidades.
Presentaba cabezas de aluminio, con enormes puertos de admisión y escape de flujo libre, una cámara de combustión en forma de media luna con grandes válvulas sobredimensionadas.
Esta unidad en particular se entregó a su primer propietario en 1969, quien usó el auto extensamente para carreras de piques, antes de venderlo y volverlo a comprar en 1985. El carro se restauró meticulosamente durante un período de tres años y se mostró en eventos importantes en 1988 y 1989.
Durante los siguientes 30 años, el automóvil fue cuidadosamente conservado y almacenado en un garaje con clima controlado. Se consignó a la venta de la casa de subastas Bonhams de octubre de 2020 y se espera que se venda entre 250 mil y 300 mil dólares.
El Ford Mustang Boss 429 es reconocido como uno de los muscle cars más raros y valorados hasta la fecha, se encuentra entre los más buscados de todos los Mustangs que no son Shelby y todos los Mustang reales que no son este adefesio.