La pandemia de COVID-19 ha dejado en claro la relevante relación con la tecnología, pues ha sido fundamental en el mantenimiento de actividades sociales como la educación y el trabajo; sin embargo, ante un mayor uso de los recursos digitales, es importante ser responsable en cuanto a la contaminación que pueden generar los dispositivos móviles.
Por: Infobae
De acuerdo con datos de la Asociación Global de Estadísticas de Residuos Electrónicos (GESP, por sus siglas en inglés), en los últimos cinco años ha habido un aumento del 21% en este tipo de basura en todo el mundo. En 2019, se generaron más de 53 millones de toneladas métricas de desechos y se espera que para el 2030, la cifra supere las 74 millones de toneladas métricas.
Si bien los usuarios suelen cambiar de dispositivos cada vez que llega uno de nueva generación, es importante señalar que los aparatos viejos pueden tener otros ciclos de vida aun cuando tienen varios años o son lentos para cumplir con sus funciones originales.
Centros multimedia y de entretenimiento
Aunque actualmente las televisiones también suelen ser dispositivos inteligentes, en las cuales se integran diversas aplicaciones para la reproducción de contenido en streaming, en ocasiones se debe recurrir a otras formas de transmisión inalámbrica, como Chromecast, de Google, por citar un solo ejemplo.
Y es a partir de este tipo de dispositivos que un smartphone, tableta o incluso una computadora vieja puede tener un segundo periodo de vida, pues en el caso de los dos primeros pueden funcionar para transmitir sus series o videos favoritos, así como para reproducir sus listas de música preferidas en apps como Spotify.
En el caso del ordenador, los sistemas de transmisión pueden ayudar a reproducir fotografías o videos. Incluso puede ser una forma de mostrar presentaciones, pues se tratan de tareas más sencillas de ejecutar, al tiempo que no se satura la capacidad en la computadora más nueva.
Cámara de seguridad
Sea un teléfono inteligente o una tableta, en ambos casos pueden convertirse en una cámara de seguridad, sin embargo, para recurrir a esta opción, se debe tener en cuenta que posiblemente se necesiten más equipo, como un soporte para instalar el dispositivo, así como aplicaciones adicionales a través de las cuales se acceda a esta funcionalidad.
Una cámara web de mayor calidad
En la actualidad, las videoconferencias se han convertido una dinámica recurrente en las oficinas digitales, es por eso que aquella cámara réflex que ya no usa mucho podría convertirse en una alternativa para mejorar su experiencia en las reuniones virtuales.
Asimismo, durante estos tiempos ha habido un auge de las transmisiones en plataformas como Twitch, en donde la gente muestra sus talentos, por lo que la vieja cámara que se había quedado sin uso podría convertirse en una opción para comenzar a compartir contenido en las redes sociales.
Lector de libros y marco digital de fotografías
Una de las opciones más relevantes para los dispositivos más viejos es convertirlos en un lector de libros digital. Quizá las tabletas pueden ser más atractivas para este fin, debido al tamaño, pero también los smartphones permiten aplicaciones como Kindle o Kobo, con las cuales se puede tener acceso a miles de títulos, desde clásicos de la literatura hasta novelas gráficas.
Asimismo, el dispositivo podría ser una forma de mostrar los recuerdos plasmados en imágenes, gracias a diversas aplicaciones que permiten ver galerías, sin embargo, es importante tener en cuenta que lo mantendrán encendido en todo momento, por lo que también será necesario siempre tenerlo enchufado.
Canjear tu dispositivo viejo para conseguir uno nuevo
Si bien el reciclaje es una de las opciones más relevantes, también se debe tomar en cuenta que se puede obtener un beneficio a partir de ese dispositivo viejo, pues algunas compañías lo aceptan para conseguir uno nuevo.
Un ejemplo de esto es Apple, empresa que cuenta con un sistema de cambio basado en una serie de requisitos, los cuales, si se cumplen, pueden disminuir el precio de un teléfono nuevo. Además, si el dispositivo aún es útil, podría venderse a otra persona por un menor precio y en caso de que no lo sea, se reciclan los materiales más valiosos.