Amazon, el innovador gigante global del comercio electrónico, es uno de los destinos más buscados para trabajar. Pero hace falta más que una buena hoja de vida para acceder a un puesto en la compañía del magnate Jeff Bezos, tal y como reconstruyó recientemente un artículo en el portal estadounidense CNBC.
Desde los inicios de la empresa en 1994, cuando había poco más de 2.000 empleados en su sede de Seattle, hasta la actualidad, con 798.000 contratados que trabajan en todo el mundo, Bezos se ha tomado muy en serio el proceso de selección de personal y ha insistido en elegir a los mejores candidatos posibles.
“Uno de sus lemas era que cuando contratas a alguien, él o ella debían subir el estándar para la próxima contratación”, indicó Nicholas Lovejoy, el quinto empleado en la historia de Amazon que ingresó en 1995, en una entrevista a la revista Wired.
¿En qué se basa, entonces, este particular proceso de selección? En tres simples y trascendentales preguntas escritas por el propio Bezos, cuya fortuna personal asciende a unos 192.000 millones de dólares según Forbes.
Las tres preguntas están pensadas para servir al seleccionador de personal al momento de contratar, y fueron expresadas por primera vez en una carta de Bezos a sus accionistas en 1998, cuando el multimillonario aún se ocupaba personalmente de sumar recursos humanos a la compañía.
1- ¿Admirarás a esta persona?
En la citada carta Bezos aseguraba que siempre ha intentado trabajar con gente a la que admira, por lo cual la primera pregunta, toda una declaración de humildad de parte del seleccionador, apunta precisamente a eso.
“Si piensas en las personas a las cuales has admirado a lo largo de tu vida, probablemente sean aquellas de las cuales has aprendido algo o a las cuales has tomado como ejemplo”, señalaba el magante.
“En mi caso, siempre traté con mucho esfuerzo de trabajar solo con personas a las cuales admiraba, y aliento a los que trabajan aquí a ser igual de demandantes con sus pares. La vida es demasiado corta para hacerlo de otra manera”, agregaba.
2- ¿Esta persona subirá el promedio de efectividad al grupo al cual se suma?
“El nivel debe seguir subiendo”, subrayaba en su carta Bezos, líder de una compañía famosa por apostar a la continuidad de sus empleados. Por eso esta segunda pregunta apunta precisamente a preguntarse por el valor agregado que aporta el candidato.
Pero a menudo es difícil para los reclutadores anticipar si el candidato seguirá involucrado y entusiasmado con la empresa en los años siguientes.
“La contratación a largo plazo es un valor central que ha estado en Amazon desde sus inicios”, sostiene la misma compañía en su página web.
Bezos propone que para evitar el desgano y el deterioro que llega con el tiempo, se le pida siempre a los candidatos que se visualicen en la compañía dentro de cinco años.
“En ese punto cualquiera de nosotros debería poder mirar y decir, ‘el nivel ha subido mucho, cuánto me alegro de haber entrado aquí en su momento’”, señaló.
3- ¿En qué área esta persona podría ser una superestrella?
Además de la experiencia y las habilidades, Bezos valora mucho los talentos individuales de cada persona, capaces de convertirlo en una “superestrella” en un área determinada, aunque que no sea exactamente la de su trabajo diario.
“Hay una persona aquí que es campeona nacional de deletreo [Spelling Bee]. Sospecho que eso no la ayuda mucho en sus actividades diarias, pero hace que el trabajo de todos sean más divertido, ya que ocasionalmente puedes lanzarle un rápido desafío: ‘¡deletrea onomatopeya!’”, expresaba Bezos en una entrevista de 2018.
“La razón por la cual quieres gente así es porque promueven el pensamiento innovador”, destacó.