Después de protagonizar una de las derrotas más dolorosas que sufrió el Barcelona en los últimos años y entrar en una relación tensa con el club, por problemas contractuales, Quique Setién decidió salir a hablar por primera vez de su paso por la institución culé.
En una entrevista con Vicente del Bosque para el diario español “El País”, el técnico de 62 años fue claro a la hora de hablar de Lionel Messi, de la situación en la que se encontraba el equipo y de su cuestionado asistente Eder Sarabia.
“En mis 40 años en un vestuario, primero como jugador y después como entrenador, he llegado a la conclusión de que tienes 16-18 hombres absolutamente comprometidos. Hay cuatro o cinco que no tienen ese entusiasmo. Luego tienes uno o dos que son complicados y retorcidos. Los he tenido como compañeros y como técnico. Esto sí ha sido permanente en todos los equipos”, explicó Setién antes de puntualizar en el capitán azulgrana.
“Leo es difícil de gestionar. También hay que tener en cuenta que es el mejor futbolista de todos los tiempos. ¡Y quién soy yo para cambiarlo! Si allí lo han aceptado durante años como es y no lo han cambiado…”, consideró Setién sobre Messi,
“Hay otra faceta que no es la de jugador y es más complicada de gestionar. Mucho más. Algo inherente a muchos deportistas como se ve en el documental de Michael Jordan (The Last Dance). Ves cosas que no te esperas (…) Es muy reservado, pero te hace ver las cosas que él quiere. No habla mucho. Sí, mirar, mira…”, agregó sobre La Pulga.
Fue en ese momento cuando Del Bosque le recordó la polémica frase que le dijo Gerardo Martino a Messi (“ya sé que si llamas al presidente me puedes echar en cualquier momento, pero no me lo demuestres todos los días”): “He escuchado esa frase y otras. Lo he vivido. He tenido experiencias suficientes para hacer una valoración exacta de cómo es realmente este muchacho y los demás”.
“Creo que Messi es el mejor de todos los tiempos. Ha habido otros grandísimos jugadores que han sido buenísimos, pero la continuidad que ha tenido este muchacho a lo largo de los años no la ha tenido nadie. Si acaso, Pelé… Le dije un día que llevaba 15 años esperando que llegara el partido del Barça para verle”, sentenció.
Con respecto a la histórica derrota que sufrió en los cuartos de final de la edición pasada de la Champions League contra el Bayern Múnich por 8-2 en Lisboa, Setién consideró que, “quedas tremendamente dañado, pasas a la historia del Barça con esa derrota. Asumo mi porcentaje de culpa. Algún día igual escribiré sobre esto” y reveló que, “tras echarme me enteré de que la decisión ya estaba tomada antes del 2-8. Me enteré de todo”.
“No he sido yo mismo. No he podido, o no he sabido, la realidad es esa”, explicó sobre sus siete meses en el banco culé. “Cuando firmas por un club de una dimensión como el Barça ya sabes que las cosas no van a ser fáciles a pesar de tener los mejores jugadores del mundo (…) Es verdad que podía haber tomado decisiones drásticas, pero tampoco hubieran arreglado nada en un espacio tan corto como el que he estado y en el que todo se concentró después del confinamiento. Al final, la tensión nos pudo. No había tiempo ni para pensar, ni para trabajar. Si tomaba decisiones drásticas podían perjudicarnos”.
Finalmente habló sobre su asistente Eder Sarabia, quien tuvo algunas apariciones que causaron polémica dentro del campo: “El primer día expliqué a los futbolistas cómo era Eder. Les dije que el primero que lo tenía que aguantar era yo. Es un hombre que tiene energía pura, que vive el fútbol con intensidad, pero que es como es”.
“El día que lo filmaron las cámaras diciendo cosas, le dije que no podía dar esa imagen. Al día siguiente hablé con los capitanes y les pedí disculpas. Ellos me dijeron que no les importaba que chillara y le llamaran la atención. No soy de pegar gritos, nunca lo fui. A veces viene bien que alguien lo haga, para meter intensidad. Los entrenamientos tienen que ser como los partidos. Muchos valoraban su figura”, concluyó.