El número de periodistas muertos en el ejercicio de sus funciones se redujo en 2018 y 2019, pero la profesión hace frente a una impunidad generalizada y a un aumento de los riesgos al margen de los conflictos armados, según la Unesco.
“A lo largo de la última década, un periodista fue asesinado como media cada cuatro días”, según el informe publicado el lunes por la Organización de la ONU para la Educación, la Ciencia y la Cultura.
En 2018 y 2019, se contabilizaron en total 156 muertes, siendo América Latina y el Caribe la región más afectada.
Sin embargo, el año pasado se registró “el número más bajo de muertos de la última década, con un total de 57”, según el informe.
Pero el periodismo se mantiene “como una profesión peligrosa”, con un incremento de los riesgos en los países no confrontados a un conflicto armado.
“Se trata de una tendencia inquietante que muestra que la mayoría de periodistas mueren ahora en situaciones al margen de los conflictos por haber efectuado reportajes sobre corrupción, violaciones de los derechos humanos, crímenes medioambientales, tráficos y delitos políticos”, según la organización onusiana.
Destaca asimismo que las mujeres periodistas pueden ser víctimas de violencia y acoso, incluido en línea.
Por otro lado, la profesión hace frente a una “impunidad generalizada”: en 2020, solo 13% de los asesinatos fueron “notificados por los Estados miembros de la ONU como casos resueltos por un proceso judicial llevado a cabo hasta el final”, frente a 11% en 2018.
La mayoría de asesinatos de 2018-2019 tuvieron lugar en América Latina y el Caribe (31% del total), región seguida por Asia-Pacífico (30%).
El informe de la Unesco fue publicado con motivo del Día Internacional del Fin de la Impunidad por los Crímenes Perpetrados contra Periodistas.
Por su parte, la ONG Reporteros Sin Fronteras (RSF) indicó que 32 periodistas y colaboradores de prensa fueron asesinados en lo que va de año, cifra menor a la del año pasado debido especialmente a la pandemia de covid-19.
AFP