En el marco de la segunda parte del foro “Venezuela sin derechos, el informe de la ONU en testimonios”, el diputado de la Asamblea Nacional Rosmit Mantilla, quien ahora se encuentra en el exilio, aludió al reporte de la Naciones Unidas como parte fundamental de las labores internacionales de la alternativa democrática.
“No hay duda de que el informe de la ONU es fundamental para evidenciar internacionalmente los crímenes de estado que se cometen en Venezuela desde el 2014”, el legislador se refirió a los actos de tortura, la persecución política, la manipulación de los poderes, la violación de los derechos humanos y los crímenes de lesa humanidad como políticas comunes para el régimen, “la tortura y la utilización del Poder Judicial como instrumento de persecución, es una práctica sistemática y reiterada del régimen desde hace 20 años”.
Mantilla mencionó el caso de los hermanos Guevara como evidencia de las prácticas torturadoras y dictatoriales del régimen desde sus inicios, “16 años tras las rejas, junto a los policías metropolitanos, esto es evidencia de la depravación de Poder Judicial desde los inicios de la dictadura”.
Sobre la presencia de Venezuela en los escenarios internacionales y su experiencia como perseguido de la dictadura aseguró que: “Afortunadamente el tiempo me da la razón y hoy estamos denunciando extinción de los derechos humanos en Venezuela. Es lo único que debemos hablar, denunciar y elevar como bandera de Venezuela ante el mundo. Lo único que demuestra la crisis humanitaria, es hablar de lo real y lo tangible”, resaltó el legislador.
“En Venezuela, se viola, se electrocuta, se encadenan y se desaparecen venezolanos en las cárceles”, denunció Mantilla, quien además recorrió minuciosamente cada caso y a manera de crónica relato sus vivencias como disidente, alegando que para la dictadura venezolana pensar distinto es delito suficiente para eliminarte del mapa político.
El dirigente del partido Encuentro Ciudadano motivó a los presentes a continuar luchando y mostrando la realidad del país a nivel internacional como arma necesaria en esta búsqueda de la libertad. “Eso es lo único y real. Esa es la Venezuela que hoy tenemos y por la que tenemos que luchar”, concluyó.