Estados Unidos criticó duramente el martes a China por no imponer las sanciones acordadas internacionalmente contra Corea del Norte y prometió intensificar las propias, a medida que se desvanecen las esperanzas de un avance de última hora bajo la presidencia de Donald Trump.
El Departamento de Estado lanzó un nuevo sitio web, DPRKrewards.com, que ofrecerá pagos de hasta 5 millones de dólares por sugerencias para impulsar sanciones contra Corea del Norte, incluidas medidas punitivas contra empresas en China.
“Vendrán más” sanciones, prometió Alex Wong, el representante especial adjunto de Estados Unidos para Corea del Norte, en un discurso en el centro de estudios CSIS.
Wong reconoció que Pyongyang aún no ha dado “ningún paso concreto hacia la desnuclearización” y expresó su alarma por la revelación de un misil masivo de largo alcance durante un desfile en octubre.
Su evaluación contrasta con las optimistas declaraciones en los últimos años de Trump, quien en 2018 se reunió con el líder norcoreano Kim Jong Un en una cumbre histórica en Singapur, seguida de otras dos reuniones.
Esta estrategia, que en cierto modo sacó a Corea del Norte de su condición de paria, redujo la tensión, que estaba en su apogeo, en torno a la amenaza atómica norecoreana.
Pero las negociaciones colapsaron rápidamente: Pyongyang pidió el levantamiento de las sanciones, mientras que Washington ha exigido una desnuclearización total antes de aliviar la presión.
Trump, que a pesar de todo presentó el apaciguamiento como un éxito diplomático de su mandato y sigue haciendo gala de su “amistad” con Kim, prefirió dar la espalda ante este estancamiento antes que endurecer la presión.
El martes, Wong apuntó principalmente contra China, un objetivo frecuente del gobierno de Trump, al acusar a Pekín de ignorar las sanciones de la ONU que él mismo votó sobre los programas nucleares y de misiles de Corea del Norte.
“El alivio prematuro de las sanciones que Pekín no puede lograr a través de la puerta principal diplomática, lo está tratando de lograr por la puerta trasera, eligiendo no implementar rigurosamente sus obligaciones según la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU”, dijo.
Señaló que barcos estadounidenses informaron a Pekín 46 veces desde 2019 sobre el contrabando de combustible de Corea del Norte en aguas chinas, y el año pasado observaron 555 casos de envíos norcoreanos de carbón de otras exportaciones sancionadas a China.
“En ninguna de estas ocasiones las autoridades chinas actuaron para detener estas importaciones ilícitas. Ni una sola vez”, señaló Wong.
Wong dijo que 20.000 trabajadores norcoreanos todavía trabajan en China, lo que va en contra de los esfuerzos respaldados por la ONU para detener lo que se considera como trabajo esclavo que el régimen de Pyongyang exporta para obtener ingresos.
China ha estado presionando para flexibilizar las sanciones contra Corea del Norte, con el argumento de que el régimen debería ver incentivos para la desnuclearización, y muchos consideran que Pekín teme una implosión económica de su vecino empobrecido.
AFP