Los progresos en la lucha contra la malaria (o paludismo) se han estancado en los últimos años, advirtió este lunes la Organización Mundial de la Salud (OMS) que recuerda que en 2019 murieron más de 400.000 personas por esta enfermedad.
La OMS subraya que este estancamiento se constata sobre todo en África, continente que cuenta con más casos de esta enfermedad transmitida por hembras de ciertos mosquitos (del tipo Anopheles) y el peor récord de muertes, según el informe que la agencia de la ONU dedica todos los años a este flagelo.
En 2019, alrededor de 229 millones de personas contrajeron la malaria, una cifra que se ha mantenido relativamente estable en los últimos cuatro años.
Tras un importante avance que redujo el número de fallecidos de 736.000 en 2000 a 411.000 en 2018 y 409.000 en 2019, la OMS destaca que “es necesario focalizar mejor las intervenciones, desarrollar nuevas herramientas y contar con más fondos para frenar la difusión global de esta enfermedad y alcanzar los objetivos comunes acordados internacionalmente”.
Al igual que para muchas otras áreas, la agencia de la ONU recuerda que el año pasado se recaudaron unos 3.000 millones de dólares (unos 2.510 millones de euros) de los 5.600 millones necesarios.
“La escasez de fondos dificulta el acceso a herramientas de lucha contra el paludismo que ya han sido probadas”, insiste la OMS y subraya que esto provoca “un importante peligro”.
En lugar de adoptar una estrategia uniforme, los países afectados basan su lucha en datos locales en su intento por acabar con esta enfermedad.
Con alrededor del 94% del número total de muertos (384.000 en el continente africano el año pasado), “es hora de que los dirigentes de África y del resto del mundo se movilicen una vez más para enfrentar el desafío que supone el paludismo”, instó el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
“Solo actuando juntos y comprometiéndonos a no dejar a nadie en el camino, podremos alcanzar nuestro objetivo común de erradicar el paludismo en todo el mundo”, añadió.
En 2019, casi la mitad de todos los casos a nivel global se concentraron en cuatro países africanos: Nigeria (27%), República Democrática del Congo (12%), Uganda (5%) y Mozambique 4%.
– Coronavirus –
A diferencia de otras campañas, la OMS asegura que la prevención contra el paludismo no se ha visto por ahora afectada por la pandemia del coronavirus, aunque considera que “el covid-19 amenaza con hacer derrapar aún más nuestros esfuerzos para vencer a la malaria y, sobre todo, para tratar a los enfermos”, señaló Matshidiso Moeti, director para África de la OMS.
“Pese al impacto devastador del covid-19 en las economías africanas, los socios internacionales y los países (en general) deben esforzarse más para garantizar que los recursos necesarios estén disponibles y poder desarrollar programas contra el paludismo, que han demostrado que pueden ayudar a las personas” afectadas, añadió.
La OMS recuerda que simples perturbaciones en el acceso a los medicamentos pueden traducirse en 19.000 muertes adicionales.
Este informe también subraya que desde 2000, 21 países han logrado erradicar la malaria.
India ha logrado en los dos últimos años resultados espectaculares con una caída del 18% de infecciones y del 20% de las muertes.
Más impresionante, han sido los logros de los seis países de la cuenca del río Mekong, en el sureste asiático, que están a punto de lograr su objetivo de erradicar la enfermedad para 2030. Entre 2000 y 2019 han reducido en un 90% el número de casos de paludismo.
AFP