Una ola de calor en Grecia con temperaturas de hasta 28 ºC incitó el domingo a los griegos a relajarse considerablemente durante el confinamiento y a buscar alivio en las playas o los parques, en una época del año en que la temperatura habitual es de 15 ºC.
Grecia impuso un confinamiento a principios de noviembre para intentar evitar una tercera ola de la pandemia de covid-19 tras las fiestas navideñas y de fin de año. El viernes, las restricciones, que debían levantarse este lunes, fueron prolongadas una semana. Solos las guarderías y las escuelas primarias abrirán el lunes.
Según el Observatorio Nacional de Atenas, en La Canea, en la isla meridional de Creta, se alcanzaron los 28,3 ºC hacia el mediodía, una de las temperaturas de enero más elevadas en cincuenta años.
En Atenas, donde los termómetros llegaron a los 22 ºC, los habitantes se desplazaron a las playas, las plazas y los parques.
“Hace un tiempo magnífico y estamos atrapados en nuestras casas la mayor parte del tiempo”, declaró en Skai TV un hombre en la playa de Kavouri, cerca de la capital, donde mucha gente paseaba e incluso se bañaba.
El viento caliente procedente de África trajo igualmente mucho polvo y se espera que se mantengan altas temperaturas hasta el miércoles.
La policía vigiló la situación para intentar evitar masivas concentraciones de gente. Agentes equipados con altavoces instaban a la población a respetar las medidas de distanciamiento físico y pusieron multas a aquellos que no llevaban mascarillas.
El domingo, las autoridades anunciaron 36 nuevos muertos por covid-19. Más de 4.000 de los 5.263 decesos por la pandemia en Grecia se produjeron en los últimos dos meses.
AFP