La isla irlandesa de Gran Blasket, o An Blascaod Mór en gaélico, es la principal de las seis que forman las Islas Blaskets, ubicadas frente a la costa de la península de Dingle, en el condado de Kerry en el suroeste de Irlanda. Actualmente, anuncia una de las vacantes laborales más codiciadas del año; está buscando una pareja o un par de amigos para administrar sus casas de huéspedes y cafetería entre los meses de abril y octubre.
Por Infobae
La publicación requiere dos personas, idealmente una pareja o amigos, para administrar una cafetería y un alojamiento en la isla desde el 1 de abril hasta el 1 de octubre. El año pasado, la pareja Annie Birney y Eoin Boyle vencieron a más de 24.000 solicitantes de todo el mundo para conseguir el codiciado trabajo. A pesar de no tener electricidad, WiFi o duchas de agua caliente, la isla es un lugar turístico popular para las personas que buscan una experiencia completa de desconexión.
“La vida allí es velas, fuegos, vida salvaje, estrellas y naturaleza. Es hermoso”, dijo la propietaria Alice Hayes a Morning Ireland de RTÉ Radio 1 el año pasado.
Great Blasket, frente a la costa de Dingle en el condado de Kerry, es lo más remoto posible. Es la isla más occidental de Europa y es salvaje, accidentada y casi poética en su espectacular belleza. Los últimos residentes permanentes se fueron alrededor de 1953 después de una fuerte disminución de la población, junto con preocupaciones sobre el acceso regular a la isla. Actualmente permanece en gran parte deshabitada, aparte de algunas cabañas de piedra blanca que están abiertas a los turistas durante la temporada alta.
La isla alberga una gran diversidad de fauna y flora pero también un pedacito de historia de Irlanda, ya que durante siglos estuvo habitada por un pequeño núcleo de población que se dedicaba a la agricultura y la pesca. A su vez, fue el hogar de reconocidos autores irlandeses como Peig Sayers, Tomás Ó Criomhthain, y Muiris Ó Súilleabháin.
En la isla principal de Blaskets, de una superficie de 4,45 kilómetros cuadrados de terreno virgen (en su mayor parte montañoso), historia y naturaleza conviven en perfecta armonía y la sensación con tan solo poner un pie en el lugar es la de que aquí el tiempo pasó de largo y nunca se acordó de volver.
Actualmente, se puede acceder a Gran Blasket en barco. Hasta ella llegan turistas deseosos de conocer este remoto lugar, uno de los más bellos e insólitos de toda Irlanda. Además, los visitantes pueden recorrerla en el día o alojarse en alguna de sus seis cabañas tradicionales para sentirse como aquellos habitantes que siglos atrás poblaron el lugar.
Los nuevos cuidadores de la isla deberán cuidar tres casas de piedra y prepararlas para los recién llegados. También tendrán que gestionar la cafetería, abrirla por la mañana y servir té y café a los invitados, excursionistas y pastores que lleguen en barco. El café se hace en una encimera de gas, conectada a botes de gas en la parte trasera de la tienda.
Los candidatos ideales deben tener buenas habilidades con las personas y cierto nivel de forma física. También deben ser adaptables. Según Alice, “cientos de cosas pueden salir mal en la isla, ningún día es igual, así que ser capaz de comprenderlo es importante”.
También necesitan poder hacer frente a duchas frías y vivir sin electricidad. Aunque Alice explicó que hay un puerto de carga, alimentado por una turbina eólica que genera suficiente energía para cargar un dispositivo, “por lo que no está completamente desconectado del continente”.
Las solicitudes se abrieron el sábado y cierran este viernes 22 de enero de 2021. Este año, hay un límite en la cantidad de solicitantes debido a la “cantidad fenomenal” de respuestas recibidas el año pasado. Sin embargo, habrán puestos disponibles en el futuro y las redes sociales de Great Blasket Island brindan actualizaciones para los interesados. Para obtener más información, consulte aquí.