El alto representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Josep Borrell, visitará a principios de febrero Rusia, en plena tensión entre el bloque comunitario y Moscú por el caso del líder opositor ruso Alexéi Navalny.
A Borrell se le espera del 4 al 6 de febrero en Moscú y será el día 5 cuando se reúna con el jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, para abordar “toda la gama de problemas y perspectivas de las relaciones entre Rusia y la UE”, según informó el Ministerio de Exteriores de Rusia en un comunicado.
Ambos han mantenido en numerosas ocasiones conversaciones telefónicas, entre otras cosas para abordar los acuerdos de Minsk para la solución del conflicto en el este de Ucrania, el conflicto armado del año pasado en Nagorno Karabaj o la crisis en Bielorrusia.
La entrevista de Lavrov y Borrell se producirá en medio de las tensiones más recientes entre la UE y Rusia por el envenenamiento de Navalni en agosto pasado, su encarcelamiento a su regreso de Alemania y la represión de las protestas en todo el país el pasado sábado para exigir su liberación.
La UE adoptó en octubre pasado sanciones por el caso Navalni a seis destacados miembros de la Administración rusa, entre los que se encuentra el jefe de del Servicio Federal de Seguridad (FSB), y una institución científica por el intento de asesinato del líder opositor en Siberia con un agente tóxico de la familia Novichok.
El caso Navalni es solo el último de los numerosos choques entre Moscú y la UE en los últimos años, no solo debido a la anexión de la península ucraniana de Crimea en 2014 y el conflicto armado en el este de Ucrania, sino también el envenenamiento del exespía ruso Serguéi Skripal en 2018 en el sur de Inglaterra, las supuestas interferencias rusas en el referéndum del Brexit en 2016 o casos de espionaje atribuidos en los últimos años a Rusia. Todo ello ha supuesto sanciones de la Unión Europea.
Rusia, que considera que la responsabilidad del actual estado de las relaciones entre Moscú y Bruselas recae en Europa, ha endurecido en los últimos tiempos su tono hacia la UE al considerar que algunos de sus miembros le tratan con “superioridad”.
Moscú aún expresó en 2019 a través de Lavrov su esperanza de que, con la elección de nuevos dirigentes de la UE, entre ellos Borrell, se abra la posibilidad de un nuevo punto de partida en las relaciones bilaterales.
Lavrov y el jefe de la diplomacia europea también abordarán la agenda internacional en su reunión del próximo día 5, incluida la situación en los Balcanes occidentales, en Oriente Medio y el norte de África, así como en el espacio postsoviético y en Nagoro Karabaj.
Asimismo, ambos pretenden abordar el futuro del acuerdo nuclear con Irán y varios temas de seguridad en Europa. EFE