Fueron más de 400 mil pesos los que tuvieron que reunir 32 pacientes de diálisis que cumplen tratamiento en el Hospital del Seguro Social Patrocinio Peñuela en San Cristóbal, para arreglar el motor del sistema de ósmosis.
Maryerlin Villanueva // La Prensa de Táchira
Y es que por cuatro meses, este aparato estuvo dañado, el cual no tuvo una respuesta oportuna por parte del régimen de Nicolás Maduro para dar solución a la problemática, que podría traer complicaciones a corto y largo plazo.
Es entonces cuando las personas cansadas de esperar, decidieron recaudar los recursos y cancelar a un técnico el mantenimiento, para así salvar sus vidas y no sufrir algún tipo de crisis a causa del daño.
Este sistema es el encargado de llevar a las máquinas el agua purificada y libre de contaminantes para poder realizar la terapia, pero debido a la avería, los trabajadores de este centro de salud estuvieron pasando el vital líquido que viene directo de la tubería por un filtro de “carbón y arena para retirar algunas partículas”.
El pasado mes de diciembre, el equipo de la Prensa del Táchira conversó con un trabajador de este centro de salud, quien para ese entonces, le indicó que el agua entra en contacto directo con la sangre, por lo cual este líquido debe ser estéril y libre de cualquier contaminante, “porque la membrana por donde se hace la diálisis es permeable al agua y los solutos, y si está contaminada, puede pasar al torrente sanguíneo y traerle al paciente una gran cantidad de complicaciones” expresó.
Entre ellas, una reacción algún pirógeno, fiebre, escalofríos, dolor muscular, o hasta intoxicación por plomo o aluminio, entre otras patologías.
Hoy día, La ósmosis abastece 13 “riñones artificiales” para atender a 32 pacientes, de los cuales dos son VIH positivo, siendo el Hospital del Seguro Social, el único centro de salud con este tipo de pacientes.
Cinco máquinas están inoperativas en este nosocomio, y los trabajadores esperan que las autoridades gestionen su reparación para ponerlas al servicio de quienes necesitan este tipo de tratamiento.
Alerta amarilla
La unidad de hemodiálisis del Centro Clínico no escapa de esta situación, pues los pacientes que cumplen tratamiento en ella, señalaron que el aparato está marcando color amarillo, por lo que temen que en cualquier momento, el aparato se echará a perder.
Manifestaron que cuando comiencen a marcar rojo, quiere decir que deberán reunir dinero para poder pagar el mantenimiento, siendo un monto elevado para estas personas.
Una paciente renal, quien prefirió resguardar su identidad, dijo que a la problemática se suma que quienes resulten positivos para el covid-19, les exigen un traje de bioseguridad, guantes, alcohol, cloro, bolsas, gorro, y tapabocas No. 95 tanto para el enfermero como para quien se somete a la terapia.
También, deberán dar una colaboración de 20 mil pesos por cada diálisis, dinero que será destinado al personal de enfermería de esta clínica.
“Quien cumpla la terapia tres veces a la semana, deberá pagar 60 mil pesos, y si el covid-19 le dura 21 días, es un monto alto que hay que pagar al cual se le debe añadir los insumos que hay llevar” acotó la paciente.