Llegaron al poder y se lo están gozando a sus anchas, mientras que Venezuela se va achicharrando en la paila del infierno en donde ellos siguen controlando el diabólico tenedor. Son los mismos estafadores del 2003, que dejaron entendiendo a los ex presidentes Cárter y Gaviria ante quienes juraron y perjuraron que “no le arrebatarían la señal a RCTV” y sabemos, al final de cuentas, lo trúhanes que fueron. Igual maroma le hicieron al Papa Francisco con el fulano diálogo del 2016. Lo dejaron “mirando pál cielo” y el cardenal Parolín se vio entonces obligado a darles un sermón público por esa temeraria jugarreta.
Los porrazos que nos hemos llevado duelen y esos dolores no deben ser en balde. Hay que sacarles algún provecho para evitar que nos frieguen una vez más. Y en eso Guaidó tiene una palabra que decir, él es una referencia importante para la comunidad internacional, más allá del declive que se comienza a sentir y para lo cual juegan en combinación los operadores del régimen como también los infiltrados de la oposición. Guaidó debe sacudirse y replantear su estrategia después que se desaprovechó ese colosal respaldo de 60 gobiernos del mundo. Si esto fuera un partido de futbol, seguro que escucharíamos a Lázaro Candal gritarle a Guaidó -¿qué hiciste papaito, qué hiciste?.
Pero el juego debe continuar y tiene que ser con grandes ligas que estén en capacidad y en condiciones de meter los goles que la gente agolpada en las gradas esperan cantarle a la narcotiranía. Porque si Guaidó continua con el mismo manager y los mismos jugadores, entonces será el espíritu del “Musiú” Lacavalerie el que le dirá “botaste la bola” y “ese no va pál baile”.
Lo cierto y, lo que cuenta, es que está viva la dignidad de los venezolanos. Ese es un capital valioso y por demás fundamental para mantener viva esta cruzada por la libertad de Venezuela. La dirigencia está obligada moralmente a ser responsable y conformar un núcleo que sea capaz de imponerse en la tarea de liberar a Venezuela.
Dr. Carlos Ismayel
Sec. Gral de ABP-Guárico
@CYsmayel