Presidente argelino disolvió el Parlamento y convocó elecciones anticipadas

Presidente argelino disolvió el Parlamento y convocó elecciones anticipadas

El presidente de Argelia, Abdemadjid Tebboune. Foto: Cortesía

 

 

El presidente de Argelia, Abdelmejid Tebboune, anunció hoy la disolución del Parlamento y la convocatoria de elecciones legislativas adelantadas en un plazo máximo de 90 días





En su primer discurso ante la nación tras regresar de una larga convalecencia en Alemania aquejado de covid-19, el mandatario anunció, igualmente, una remodelación del actual gobierno y un indulto para 30 activistas procesados por su participación en las protestas populares masivas contra el régimen o “Hirak”, cuyo segundo aniversario se celebra el próximo 22 de marzo.

Tebboune insistió en la estrategia del régimen de apropiarse de esa ola popular que se levantó primero contra el longevo y enfermo presidente Abdelaziz Buteflika -quien dimitió en abril de 2019- y que después ha devenido en un movimiento de oposición y resistencia contra el régimen militar que domina Argelia desde la independencia de Francia en 1962.

Y aseguró que todas las medidas anunciadas este jueves son el colofón reformista de lo que denominó como “el Hirak auténtico”.

“Hemos revisado la Constitución, introduciendo la libertad absoluta individual y colectiva, hemos reducido los poderes del presidente de la República y ahora hemos decidido disolver la actual Asamblea y dar paso a nuevas elecciones”, declaró el jefe del Estado en un discurso difundido a través de la televisión estatal, con la ocasión del “día del mártir”.

“El Parlamento electo será el ojo y voz del pueblo. resultado de unas elecciones alejadas del dinero sucio. El próximo Parlamento será elegido bajo el estricto control de la Autoridad Electoral Independiente, lejos de cualquier intervencionismo de la administración incluido el presidente “, recalcó.

REMODELACIÓN DE GOBIERNO

Tebboune, que instó a los jóvenes a implicarse en el proceso y a votar para tratar de evitar el resultado de la última consulta, en la que la abstención superó el 60 por ciento, anunció, asimismo, una remodelación del actual gobierno, que lidera el primer ministro, Abdelaziz Djerad.

Según el mandatario, “el ciudadano sentía que fallaba en su misión” y que no era capaz de sacar al país de la aguda crisis económica y política que padece desde que en 2014 se desplomara el precio del petróleo y el gas, única riqueza que Argelia explota.

La atmósfera política, económica y social se ha deteriorado con el impacto de la pandemia, pese a que ha acabado con las manifestaciones que semanalmente cada martes y cada viernes desde el 22 de febrero de 2019, han hundido aún más el país, cuyas fronteras están cerradas desde el pasado mes de marzo.

La crisis, agudizada por la debilidad de las reservas de divisas -que han caído desde los 178.000 millones de euros en 2014 a los actuales 75.000 y son esenciales en la economía subsidiaria y proteccionista de corte socialista que domina Argelia- han impulsado a miles de jóvenes a la migración irregular, con Francia y en particular España como destinos preferidos.

“HIRAK AUTÉNTICO”

El presidente argelino anunció, asimismo, un indulto para una treintena de las miles de personas que han sido detenidas y procesadas en Argelia durante los dos años que dura la represión del Hirak.

“Firmé un decreto presidencial para indultar a un grupo de detenidos, unas 30 personas, que han sido condenadas definitivamente, y otras, que no han sido condenadas. En total, entre 55 y 60 personas que se unirán a sus familias, desde esta noche o mañana con ocasión del segundo aniversario del Hirak auténtico”, afirmó.

El anuncio se produce apenas tres días después de que la justicia argelina condenara a otra de las figuras del Hirak, Chems Eddine Laalami, a dos años de cárcel y 1.250 euros de multa por “ofensa al presidente de la República”, “ultraje a las instituciones” y “publicación de informaciones falsas”

Según el Comité Nacional para la Liberación de los Detenidos, más de 70 personas se encuentran encarceladas actualmente en el país en relación con las protestas populares o la reivindicación de las libertades individuales.

Entre los presos destaca el periodista a Khaled Drareni, convertido en símbolo de la lucha por la libertad de prensa en Argelia, condenado en firme a dos años de cárcel después de que un tribunal de primera instancia le impusiera tres años, la pena más alta jamas impuesta por estos delitos en Argelia.

Durante las protestas que condujeron a la renuncia de Buteflika también se encarceló y condenó a duras penas de prisión a políticos, empresarios y militares cercanos al presidente, entre ellos su hermano y asesor, y sus dos primeros ministro más longevos, Ahmed Ouyahia y Abdelmalek Sellal.

EFE