El Parlamento húngaro aprobó este lunes una extensión de 90 días del estado de emergencia por la covid, con lo que las competencias extraordinarias que supone ese estado para el Gobierno del ultranacionalista Viktor Orbán continuarán en vigor hasta el 23 de mayo próximo.
La prolongación fue adoptada con el apoyo de los diputados del gobernante partido Fidesz de Orbán, mientras que la oposición votó en contra por rechazar los poderes extraordinarios del Ejecutivo, que bajo el estado de emergencia puede imponer por decreto restricciones y medidas para luchar contra la pandemia.
Los partidos opositores acusan al Gobierno de haberse aprovechado de la situación para adoptar medidas que, consideran, van más allá del problema epidemiológico, como una serie de disposiciones que redujeron los medios financieros de los ayuntamientos dirigidos por la oposición, recordó hoy Tamás Harangozó, del Partido Socialista.
Por su parte, la Coalición Democrática criticó el decreto que autoriza el uso de vacunas que se hayan inoculado en más de un millón de personas a nivel mundial, una fórmula mediante la cual Budapest dio la luz verde a la aplicación del fármaco chino Sinopharm.
Así, Hungría se ha desmarcado de sus socios comunitarios a encargar 5 millones de dosis de esa vacuna china a pesar de que su uso no está de momento autorizado en el territorio de la Unión Europea (UE), de igual forma que ha hecho con la rusa Sputnik V.
Mientras que ésta última ya se aplica en este país centroeuropeo, el inicio de la vacunación con Sinopharm se espera para el próximo miércoles, según adelanto hoy el órgano operativo encargado de las labores de lucha contra la covid.
De los casi 10 millones de habitantes de Hungría, un total de 453.457 personas han sido vacunadas hasta ahora, en su gran mayoría con los fármacos de las occidentales Pfizer/BioNTech, AstraZeneca y Moderna, autorizadas en la UE, así como con Sputnik V.
En las últimas 24 horas el país ha registrado 2.623 nuevos casos de coronavirus y 48 fallecimientos por la covid-19.
EFE