Su lectura me trajo a la memoria episodios importantes de la democracia, que recuerdo con pasión, estando muchos de ellos ligados a mí por cuenta de Cartay. Aprovecharé para recordar algunos en aras de resaltar como la democracia representativa, fue en Venezuela una obra relevante, gracias a los partidos políticos que como toda obra humana no está exenta de errores, prevaleciendo el saldo positivo, sobre todo ahora, cuando comprendemos como estos tirabuzones totalitarios solo dejan tierra arrasada y dolor en una Venezuela rota y saqueada.
Cartay es un intelectual de la democracia, de gran formación de escuela pública, a la cual tuvimos posibilidad de acceder e integrarnos en el entrenamiento democrático.
Ahora recuerdo las primeras elecciones donde participé en el Liceo O’leary de Barinas, en segundo de bachicherato, siendo electo secretario de cultura con el apoyo del partido COPEI, impulsado por Cartay, en una demostración que derrotaba los planteamientos sectarios y donde nos unía el trabajo de nuestro Liceo. Mucho tiempo después nos fuimos a la UCV, él primero obviamente. Siempre compartimos posturas en organizaciones distintas, pero privilegiando los intereses sociales.
En otra oportunidad me atreví a optar para participar en un curso de política en el Instituto Arístides Calvani, fui aceptado a pesar de no ser copeyano. Nada me exigieron. Una vez en el curso dije ser amigo de Cartay y la profesora comentó para mi sorpresa: “sí nosotros lo sabemos. Ustedes son de Barinas”. Un relato tan sencillo demuestra lo que era la democracia.
Siendo el Doctor Ciliberto de AD, Ministro de Interior y desempeñándome como Director del Diario “Frontera”, reseñamos una noticia donde fue asesinado un Doctor merideño, por parte de un cuerpo policial. Ante la amenaza del Ministro acudí a Cartay quien era Diputado por Barinas. Inmediatamente actuaron en mi defensa los Diputados social cristianos de la comisión de medios: Nelson Chitty la Roche y Julio Cesar Moreno.
Demostré en dicha comisión la veracidad de lo informado y el Ministro Ciliberto se excusó, actuaron los Tribunales, se hizo Justicia, y me conto luego, en una visita a Mérida, que el Diputado Cartay declaró con argumentos irrefutables, apoyado en la investigación que realizó junto a la Roche y Moreno.
En Mérida desempeñándome como profesor de la ULA y militante del MAS, Rafael Simón Jiménez me llamó para informarme del apoyo de este partido a la candidatura de Cartay como Gobernador de Barinas.
Inmediatamente, me integré en la campaña y recuerdo un afiche que decía “Cartay Gobernador: Con Barinas no se juega”.
Cito estos casos porque creo que son una demostración palpable de como la democracia, nos acercaba, no importando el distanciamiento ideológico, sino las necesidades de la sociedad. Fue un gran Gobernador y un gran Diputado. Es un baluarte democrático.
Al caer esta Tiranía es necesario que los partidos políticos asuman el gran peso de fortalecer los valores de la democracia y la libertad.
Estoy seguro que COPEI volverá con sus talentos y con una nueva generación, para proseguir la lucha de grandes próceres civiles como Rafael Caldera, Luis Herrera Campins, Arístides Calvani y tantos dirigentes como Cartay, Vivas Terán, Chitty La Roche, Pérez Vivas, Paciano Padrón y muchos que se formaron en aras de la libertad. Grandes mujeres copeyanas, ofrecieron su vida al país: Mercedes Pulido, Haidee Castillo, Mechita Vivas.
La Historia de COPEI es parte valiosa de la Historia de Venezuela. –