Un grupo de ONG de ayuda internacional advirtió el lunes del riesgo de hambruna en siete países frágiles -Afganistán, República Democrática del Congo, Somalia, Sudán del Sur, Siria, Yemen y los campos de refugiados rohinyás en Bangladés- debido al coronavirus.
“El impacto de la pandemia ha paralizado las economías, haciendo que las personas más pobres del mundo sean aún más pobres”, afirmó Saleh Saeed, el director general del Comité de Emergencia para Desastres (DEC), que reúne a 14 oenegés, incluidas la Cruz Roja británica, Oxfam y Save the Children.
“Las personas que viven en lugares peligrosos debido a los conflictos, la violencia y las catástrofes climáticas están haciendo frente a la pandemia de coronavirus lo mejor que pueden, pero el destino está en su contra”, añadió desde una conferencia virtual de Naciones Unidas sobre Yemen.
Partes de Yemen y Sudán del Sur están ya al borde de la hambruna, que también amenaza a Afganistán y a la República Democrática del Congo, afirma en su último informe el DEC.
“Sin un apoyo continuado, se perderán muchas vidas, no sólo por el propio covid-19, sino también por el impacto económico del virus”, subrayó Saeed.
La ONU pidió en la conferencia virtual organizada por Suiza que se recaudaran 3.850 millones de dólares (3.200 millones de euros) para combatir la hambruna en Yemen.
En noviembre, el gobierno conservador británico anunció que recortaba su generoso presupuesto de ayuda internacional en unos 4.000 millones de libras (5.600 millones de dólares, 4.600 millones de euros), desatando la ira de las oenegés en plena pandemia.
El recorte de la ayuda internacional a Yemen “continuaría el lento, doloroso e indecente proceso de matar de hambre” a millones de personas, declaró el lunes a la BBC el exsecretario de Desarrollo Internacional conservador Andrew Mitchell.
AFP