MATRAQUEO “Pal fresco”: El cuento que todos los venezolanos conocemos, hemos vivido y continúa siendo costumbre incluso de aquellos se suponen “cuidan” al pueblo.
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La anécdota de un taxista ha captado nuestra atención, pues este hombre relató su experiencia con “la matraca” en esta oportunidad cortesía de la GNB.
Víctor Lovera es un conductor que trabaja haciendo carreras vía Caracas – La Guaira, este 3 de marzo a las 4:35 am, él y sus pasajeros fueron víctimas de extorsión en una alcabala de la Guardia Nacional Bolivariana, cuando los sujetos uniformados decidieron “hacer su trabajo”.
Según el relato de Lovera, fueron retenidos en la alcabala para una revisión del vehículo y papeles, cuestiones que se encuentran en orden, representando el primer fail para los esbirros, quienes optan por un segundo lanzamiento, revisar a los pasajeros, ojearon maletas; documentos: pasajes, todo en orden. Sería lógico dejarlos ir.
Sin embargo vuelven con una tercera jugada, alegando que “deben” revisar las pruebas PCR de los pasajeros “Imagínense a esa hora y sin ningún sistema. Un psicoterror los jóvenes se preocupan y este guardia llama a otro para que le preste apoyo” manifestó Víctor el taxista.
El momento del descaro
El cuento continúa pues resulta que al GNB solo le quedo ser “cara e´ tabla” y explicar “Que le dé algo por qué su compañero está buscando excusas para que pierdan el vuelo” ante esto el joven tuvo que ceder para evitar problemas, indicó Lovera.
Víctor siguiendo los pasos pertinentes ante este tipo de situaciones se dirigió al llegar al Aeropuerto al comando que opera desde ese sitio, pero lo absurdo es que el preso iba a ser él “Fuimos víctimas de un psicoterror donde mis pasajeros los robo la guardia Nacional, no es posible unos jóvenes que tenían todo en regla” acotó Víctor el Taxista en su cuenta Twitter.