El resultado más revelador de la encuesta de Invamer dado a conocer este miércoles tiene que ver con el desplome en la aprobación a la gestión de la alcaldesa de Bogotá, Claudia López. Según las cifras, ese indicador cayó del 89 % en abril de 2020 al 52 % en febrero de este año.
Lo más sorprendente es el aumento en la desaprobación a su gestión, que pasó del 9 % al 43 % en el mismo periodo. La ciudadanía le está pasando una cuenta de cobro a la mandataria por el incremento de la inseguridad en la capital del país, el desempleo y sus polémicas vacaciones a Costa Rica en pleno segundo pico de la pandemia. Adicional a ello, la opinión pública rechaza sus constantes peleas y salidas en falso, así como el incumplimiento a su promesa en campaña de no construir una troncal de buses en la carrera séptima, pues el corredor verde así lo contempla.
Hoy, Claudia López es la cara más visible de la coalición que se empieza a organizar en la centroizquierda de cara a las presidenciales de 2022. Aunque no sea la candidata, el rumbo de su gestión incidirá en cómo los ciudadanos perciben a ese bloque. Pero con estos resultados de Invamer, en lugar de sumar, ella puede empezar a restar.