Pretenden extender e imponer, desde ya, el tal Sistema Patria al ámbito de la educación privada, como – es firme nuestra convicción – a todo el país. Aparente y solo aparentemente, hay un pequeño retroceso de los rojos-rojitos ante la Asociación Venezolana de Educación Católica (Avec).
Incluso, hay quienes arman una fiesta por tal motivo. Algún sabio opinante o dirigente de la universidad, en un rapto de autonómica postura, jurarå que la fiesta también es para ella.
Olvidamos con frecuencia lo ocurrido en 2007, con la reforma constitucional que les falló a pesar de las colosales inversiones realizadas. Nada más y nada menos que un referéndum dirimió el asunto, a pesar de las trampas, y a la vuelta de la esquina lo apuñalaron hasta el sol de hoy.
Entonces, ¿celebrar qué cosa? Además, hasta el presente, el tal sistema les es un buen misil de demolición de las instituciones, como las que que explican el derecho laboral en Venezuela, por ejemplo. Y miren que estos socialistas no se caracterizan como los extraordinarios ideólogos y estrategas que tuvieron con Lenin y Trotsky, en Rusia, otro ejemplo.
!Avispense, pues! Acá, ellos no juegan carritos ni muñecas. ¿Por qué algunos gustan de sus piñatas?