Las autoridades de Florida están evacuando a unos 345 reclusos del primer piso de una cárcel del condado en medio de preocupaciones sobre el posible colapso de un embalse local, según informes del domingo.
Por New York Post
La Cárcel Central del Condado de Manatee se encuentra en la esquina de una zona de evacuación que rodea la antigua mina de fosfato de Piney Point, donde unos 300 millones de galones de aguas residuales amenazan con romper un depósito e inundar el área circundante.
El administrador del condado de Manatee, Scott Hopes, dijo que los modelos muestran que el área podría cubrirse con un pie a cinco pies de agua. El segundo piso de la cárcel está a 10 pies sobre el suelo.
El domingo, el alguacil del condado de Manatee, Rick Wells, se negó a compartir el lugar donde la cárcel lleva a los presos, ya que aún los estaban moviendo. Dijo que el plan original del condado, mover a todos los reclusos al segundo piso, sería un riesgo de seguridad demasiado grande , según el Tampa Bay Times.
La cárcel albergaba a 1.063 presos el domingo. Los presos restantes y el personal en el primer piso de la cárcel serán trasladados al segundo piso, junto con el equipo médico, informó el periódico.
“El primer piso estará vacío”, dijo Wells.
La representante estatal de Florida, Michele Rayner-Goolsby, demócrata, dijo que estaba de acuerdo con el plan de Wells.
“Hablé con el alguacil Wells y me aseguró que existe un plan para asegurarse de que los reclusos de la cárcel estén protegidos y sean evacuados de manera segura”, escribió Rayner-Goolsby en Twitter. “Como puedo compartir el plan completo, lo haré. Pero sepa, estoy bien con el plan “.
El domingo, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, dijo que las cuadrillas estaban trabajando para evitar el colapso del embalse mientras evacuaban el área para evitar una “inundación catastrófica”.
Las autoridades dijeron que tiene el potencial de derramar 340 millones de galones de agua en cuestión de minutos, arriesgando una pared de agua de 20 pies de altura. El estanque contenía unos 480 millones de galones la semana pasada. Hasta el domingo, tenía alrededor de 300 millones de galones.
“Lo que estamos viendo ahora es tratar de prevenir y responder, si es necesario, a una situación de inundación catastrófica real”, dijo DeSantis en una conferencia de prensa después de sobrevolar la mina de fosfato.
Los funcionarios del condado y del estado están trabajando actualmente para bombear agua fuera del depósito para reducir la cantidad en caso de una brecha. Las autoridades cerraron partes de la Carretera 41 de los Estados Unidos y ordenaron la evacuación de 316 viviendas. Algunas familias fueron ubicadas en hoteles locales.
Las cuadrillas han estado descargando agua desde que el estanque comenzó a gotear en marzo. El viernes se detectó una fuga importante que intensificó la respuesta y provocó las primeras evacuaciones y una declaración del estado de emergencia el sábado.
Actualmente, se descargan alrededor de 22,000 galones de agua por minuto, pero Hopes dijo que espera que el riesgo de colapso disminuya para el martes.