Las autoridades de Costa Rica informaron este sábado la detención de una banda integrada por cinco personas, entre ellos un nicaragüense quien lideraba la organización, que se dedicaba al almacenamiento de armas y drogas en la zona norte del país.
El Organismo de Investigación Judicial indicó en un reporte preliminar que la fuerza pública y agentes judiciales realizaron durante la noche del viernes dos allanamientos en la localidad de San Carlos (norte), donde se logró la captura de cinco hombres que figuran como sospechosos de infracción a la Ley de Psicotrópicos y la Ley de Armas, entre otros.
“En una de las viviendas allanadas, se logró ubicar a cinco hombres quienes aparentemente pertenecen a un grupo criminal y que en la investigación se determinó se habrían desplazado a ese sector a establecer su centro de operaciones de bodegaje y almacenamiento de armas y droga”, explicó el organismo en el informe.
Los detenidos fueron identificados como dos hermanos indocumentados de nacionalidad nicaragüense, de apellidos González, uno de 29 años que es el líder y otro 35. También un hombre de apellido Rivas, de la misma nacionalidad, así como dos costarricenses: uno de apellido Peña, de 22 años, y otro identificado como Casanova, de 26 años.
Según el trabajo de inteligencia, las autoridades establecieron que habrían alquilado las viviendas en la misma zona, a una distancia de 150 metros una de la otra, en apariencia no solo para utilizarlas en sus movimientos, sino también para no ser ubicados por algún grupo delictivo contrario.
El Organismo de Investigación Judicial explicó que el operativo fue producto de las labores de investigación que está realizando personal en la zona Sarapiquí, debido al aumento de hechos delictivos, entre ellos casos de homicidios, que han venido ocurriendo en la localidad, los cuales se presume obedecen a temas de drogas y disputas entre bandas para acaparar territorios para la venta de estas sustancias ilícitas.
Entre lo decomisado se encuentra un arma Ak-47, un fusil de asalto mini 14, dos granadas de fragmentación, municiones de diversos calibres, varios cargadores para el arma Ak-47, chalecos antibala, dinero en efectivo, dos kilos de marihuana comprimida y teléfonos celulares, entre otros.
Los cinco sujetos fueron pasados con un informe al Ministerio Público para determinar su situación jurídica. Las investigaciones en torno al caso continúan, pues no se descarta la participación en otros hechos delictivos cometidos en la zona.
EFE