La relación entre la caída del producto interno bruto y la drástica disminución de los índices sociales, se hace evidente cuando se establece un seguimiento durante los últimos 10 años entre la disminución del producto interno bruto la cual sobrepasa el 70% y el aumento de los niveles de pobreza, bajo consumo, desempleo, entre otros.
Vicente Brito
En los niveles de pobreza es donde se observa un preocupante crecimiento a medida que el proceso hiperinflacionario se convirtió en una constante desmejora social, se estima que para aproximadamente un 80% de las familias, sus ingresos mensuales no les permite adquirir la canasta alimentaria, la cual está conformada por aquellas cuyos ingresos son totalmente en bolívares, existe un 20% que puede adquirir buena parte o el total de la canasta alimentaria, son los que reciben un salario parcial o total en dólares, así como los que reciben ingresos por remesas de sus familiares del exterior. La clase media ha sido la más afectada al observarse como paso de conformar más de la mitad de las familias a un 20% que se estima actualmente.
Sus efectos en el consumo familiar son de disminución preocupante sobretodo en los últimos 4 años, observándose una reducción de hasta más del 50% en productos esenciales como: carne, pollos, huevos, queso, embutidos, pescado, margarinas y aceites, entre otros. Si observamos los aumentos del costo de estos productos, van de manera paralela al crecimiento de los índices inflacionarios, igual observamos con la fluctuación del dólar y su relación con el índice de precios, al encontrarnos que buena parte del consumo son productos importados, lo cual nos hace altamente vulnerable a las variaciones del tipo de cambio.
Observamos cómo las empresas nacionales han venido reduciendo su producción o simplemente dejaron de producir, se hace evidente al analizar en la caída del producto interno bruto el cual es el reflejo mas evidente de la situación económica del país, al encontrarnos con que todos los sectores han reducido sus actividades económicas hasta en un 80% al compararlos con hace 22 años. Su efecto en el empleo es evidente al encontrarnos con el mayor desempleo del mundo al ubicarlo en casi un 60% según cifras estimadas de organizaciones nacionales e internacionales. Observándose como buena parte de estos desempleados se dedican a la actividad informal como medio para generar ingresos que contribuyan con el consumo familiar.
Es preocupante los bajos índices sociales que existen en el país afectados por los caída del producto interno bruto, los cuales sólo pueden superarse en la medida que se tomen decisiones que conduzcan a la recuperación económica de la nación.