Un granjero de Idaho ha perdido 54 de sus corderos en una serie de ataques de águila calva que comenzaron en abril, según un informe.
Por New York Post
Rocky Matthews, propietario de una granja cerca del lago Murtaugh, no sabía qué estaba matando a sus corderos hasta que presenció cómo una de las águilas atacaba a su rebaño, le dijo al Times-News .
Matthews le dijo al periódico que las águilas han anidado en su granja durante más de 20 años, pero que nunca han lanzado ataques contra sus animales.
“Nunca se habían cruzado hasta este año”, dijo Matthews.
“El daño debajo de la piel es cien veces mayor que lo que se ve en el exterior”, dijo.
El granjero cree que las águilas, que normalmente se alimentan de peces, recurrieron a matar sus corderos porque el lago tardó más en calentarse este año.
Matthews ha optado por trasladar su ganado más cerca de su granero con la esperanza de que las águilas se mantengan alejadas.