El expresidente de Nicaragua Enrique Bolaños Geyer (2002-2007) falleció a los 93 años, tras sufrir un “quebranto de salud”, informaron este martes sus familiares.
“Con profundo dolor la familia del ingeniero Enrique Bolaños Geyer, expresidente de la República de Nicaragua, comunica el sensible fallecimiento de su amado padre, abuelo y bisabuelo, acaecido a las once y cinco de la noche de ayer catorce de junio (05.05 GMT de hoy martes)”, comunicaron sus familiares en la cuenta en Facebook de la biblioteca virtual que lleva el nombre del exmandatario.
Las razones del fallecimiento del expresidente, quien tenía su salud “quebrantada” desde agosto de 2020, no fueron divulgadas. Dos semanas atrás Bolaños había recibido la vacuna contra la covid-19 Sputnik V.
Los familiares del exmandatarios mostraron su interés en que las exequias se desarrollen de forma discreta en el municipio de Nindirí, a 21 kilómetros al sureste de Managua, debido a la pandemia.
“Por las condiciones actuales agradecemos que desde sus hogares nos acompañen con una plegaria al Creador por su eterno descanso. Sabemos que en otros tiempos nos acompañarían a darle el último adiós, sin embargo él, desde su quebranto de salud, llamó siempre a la prudencia y al cuido”, señalaron.
“Inspirémonos en el legado de don Enrique, el legado de los buenos nicaragüenses que pensaron más en la Patria que en ellos mismos. Es el mejor tributo que le podemos rendir”, agregaron.
El Gobierno de Bolaños, que se caracterizó por sanear la economía de Nicaragua y combatir la corrupción de su antecesor, el presidente Arnoldo Alemán (1997-2002), era un crítico del actual gobernante Daniel Ortega.
Durante el estallido de la crisis sociopolítica de 2018, Bolaños recomendó a Ortega renunciar a la Presidencia, y en 2020 criticó al exguerrillero sandinista por su gestión de la pandemia, con la que no estaba de acuerdo.
Bolaños era un líder empresarial que incursionó en la política cuando defendió al gremio empresarial bajo el primer mandato de Ortega (1979-1990), por lo cual sufrió cárcel y expropiaciones.
Su activismo desde la acera de los empresarios lo llevó a ser vicepresidente entre 1997 y 2000, en la época de Alemán, desde donde promovió la modernización del sector público y la separación de los Poderes del Estado.
Conocido por su transparencia, en 2007 Bolaños se negó a recibir los cheques que le correspondían como diputado ante la Asamblea Nacional por ser expresidente.
Como presidente se destacó en temas económicos, al firmar el Tratado de Libre Comercio de Centroamérica con Estados Unidos (actualmente DR-Cafta), lograr el perdón del 80 % de la deuda externa del país, cerrar con niveles de crecimiento económico positivos, controlar la deuda estatal y dar estabilidad al Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS), cuyos problemas financieros bajo la administración Ortega provocaron la crisis de 2018.
Sin embargo, nunca tuvo reparo en declarar como su legado más preciado la Biblioteca Virtual Enrique Bolaños Geyer, considerada por algunos como la más completa de Nicaragua.
EFE