El proyecto de reconstrucción de algunos de los monumentos más importantes de la ciudad iraquí de Mosul, como la mezquita de Al Nuri y dos iglesias cristianas, destruidos por el grupo terrorista Estado Islámico (EI), busca recuperar el espíritu de diversidad cultural de esta urbe, afirmó hoy la Unesco.
“Esta iniciativa busca revivir el espíritu de una ciudad (…), la representación de la cultura de diversidad de Irak”, aseguró el subdirector general de Cultura de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), el exministro chileno Ernesto Ottone, durante un seminario virtual sobre el proyecto “Revivir el Espíritu de Mosul”.
El proyecto, financiado por Emiratos Árabes Unidos, se propone reconstruir la emblemática mezquita de Al Nuri, del S. XII d.C., su minarete y las iglesias cristianas de Al Taher y Al Saa’a, destruidos en el centro de Mosul por el grupo yihadista en 2017, cuando aún ocupaba la ciudad.
Ottone explicó que las primeras fases del proyecto, consistentes en el desminado de esos espacios, la documentación, la retirada de escombros, la recolección de todos los fragmentos históricos recuperables y el afianzamiento de las estructuras que han quedado el pie, ya están completadas.
La reconstrucción de las dos iglesias comenzará entre los meses de octubre y noviembre próximos y la de la mezquita y el minarete, en diciembre, según el representante de la Unesco.
Esta última se hará en base a un proyecto de un equipo de arquitectos egipcios que ganó el concurso lanzado por la Unesco y que ha suscitado algunas críticas por ser considerado demasiado moderno.
“Durante la fase de desminado y aseguramiento, cada pedazo de historia que hemos podido recuperar lo hemos guardado para integrarlo en el proyecto final”, indicó Ottone respecto a la reconstrucción del templo musulmán y su icónico minarete inclinado de 45 metros de altura, que el EI dinamitó antes de ser expulsado de Mosul.
No obstante, apuntó que “cuando se habla de moderno o antiguo es siempre subjetivo” porque incluso antes de la destrucción había miles de años acumulados en “diferentes capas unas sobre otras”, ya que la ciudad fue fundada en el S. VII a.C., en la época de los sumerios.
También destacó que el aspecto crucial del proyecto son la mezquita y su minarete “jorobado”, como se le conoce, y que otros elementos, como el centro educacional y cultural, que son las partes más modernas, solo “son complementarios”.
EFE.