El enviado de la ONU para Oriente Medio, Tor Wennesland, advirtió este jueves que el alto el fuego alcanzado el mes pasado entre Israel y las milicias palestinas de Gaza sigue siendo “muy frágil”, por lo que urgió a todas las partes a evitar cualquier movimiento que pueda reavivar el conflicto.
“Urjo a todas las partes a evitar pasos unilaterales y provocaciones, a dar pasos para reducir las tensiones y a permitir que estos esfuerzos (de mediación) tengan éxito”, dijo Wennesland en una comparecencia ante el Consejo de Seguridad.
El diplomático defendió que todo el mundo debe poner de su parte para facilitar las “conversaciones en curso para estabilizar la situación sobre el terreno y evitar otra devastadora escalada en Gaza”.
El alto el fuego alcanzado el 21 de mayo puso fin a 11 días de fuerte escalada bélica, la peor en Gaza desde 2014.
Wennesland defendió que los esfuerzos internacionales se centren ahora mismo en reforzar ese cese de las hostilidades, llevar asistencia humanitaria e iniciar la reconstrucción de Gaza, pero subrayó que también es necesario volver a poner sobre la mesa un horizonte político para resolver el conflicto.
El enviado de la ONU advirtió además al Consejo de Seguridad sobre las actividades de asentamientos israelíes y sobre el incremento de los episodios de violencia vinculados a los colonos.
“Una vez más subrayo, sin lugar a dudas, que los asentamientos israelíes constituyen una violación flagrante de las resoluciones de Naciones Unidas y la ley internacional. Son un gran obstáculo para lograr una solución de dos Estados y una paz justa, duradera y total. El avance de toda la actividad de asentamientos debe cesar inmediatamente”, recalcó.
EFE