Dirigentes sociales de Coro y comunidades aledañas se reunieron en la ciudad, para debatir sobre la pertinencia y motivos de su distanciamiento con Maduro. Dicen que se sienten abandonados. La crisis de los servicios y el alto costo de la vida los sacude. Hoy lo dicen abiertamente, aunque denuncian que les ha costado el rechazo de algunos que aún no toman la decisión.
“Nos niegan la compra de bombonas por no compartir sus ideales, además de la corrupción cuando cobran de más.Yo quiero que todo el mundo pierda ese miedo a dejar de recibir la bolsa”, expresó Marbelys Salón, vecina del sector Aloncito y ex miembro de los CLAP.
Yennise Morales también pasó por esta situación. “Yo pertenezco al PSUV, no como una dirigente activa, sino porque comencé con las líneas de Chávez. Creí en él, pero después me di cuenta que no había ningún imperialismo, sino una gran corrupción, pero hay miedo a decir que no se pertenece al PSUV”.
La reunión comenzó antes de la hora, porque algunos de los asistentes habían madrugado para llegar. La escasez de unidades de transporte público y las fallas en el suministro de combustible para las estaciones de servicio de la región, hacen que movilizarse sea una labor titánica. Ya en el lugar, otras razones comienzan a aflorar sin esfuerzo y dejando ver las heridas.
“Me desencanté con todo lo que estamos viviendo. Tengo a mis dos hijos fuera del país, lloro por eso.Tengo un hijo que tiene una discapacidad y no consigo los medicamentos que necesita o es muy caro, en dólares. Todo está dolarizado y nosotros ganamos en bolívares. Esto tiene que acabarse. Aquí no hay revolución”, dijo Marbelys.
Reconocen que no se alimentan bien, que el sistema educativo se vino a menos, que hay escasez de agua potable, que rezan para no enfermarse porque los hospitales y ambulatorios no tienen nada para atenderlos, en un estado con casos de COVID-19 en aumento.
Reconciliarnos para recuperar la democracia
En Coro, quienes llegaron a apoyar a Maduro y hoy se declaran en su contra, creen en la reconciliación de los venezolanos y en superar la polarización, como el inicio del camino hacia la verdadera recuperación de la democracia. Advierten que desde el gobierno se dedicaron a romper la unidad social porque les interesa mantenerlos divididos.
“Aquí lo que hace falta es una reconciliación. ¿Por qué si podemos convivir distintos grupos religiosos, no puede ser así a nivel político? La reconciliación debe comenzar por renunciar al odio y reconocer que hay puntos en los que coincidimos. Tenemos que despolitizar lo social, la dirigencia. Mientras no despoliticemos lo social, la familia, no avanzaremos, ahora todo está politizado”, manifestó Alfredo Cuello, ex director de desarrollo comunal de la comunidad de Los Pozos.
En las próximas semanas se reunirán nuevamente porque, aunque apoyan la participación en las regionales para empujar el cambio político en el estado y en el país, creen que la presión por exigir la atención de sus problemas urgentes no debe estar supeditada a candidaturas.