Se espera que la administración del presidente Biden comience a liberar a las mujeres embarazadas y a las que recientemente dieron a luz después de que son detenidas cruzando ilegalmente la frontera entre Estados Unidos y México.
Por New York Post
Aunque menos de 20 personas actualmente en poder del gobierno serían liberadas, los cambios de política de la administración Biden anteriores han sido criticados por alimentar involuntariamente la crisis fronteriza en curso.
En una ruptura con las políticas de la administración Trump, Biden se negó a deportar a los menores que cruzaron ilegalmente la frontera sin sus padres, una decisión que los críticos dijeron que contribuyó a la situación actual, que es impulsada por unidades familiares y niños no acompañados de Centroamérica.
La nueva política se aplicará al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas, pero no a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos, lo que significa que las mujeres podrían ser aprehendidas en la frontera antes de ser liberadas por ICE, informa el New York Times.
“ICE está comprometido a salvaguardar la integridad de nuestro sistema de inmigración y preservar la salud y la seguridad de las personas embarazadas, posparto y lactantes”, dijo el director interino de ICE, Tae Johnson.
“Dadas las necesidades únicas de esta población, no detendremos a personas que se sepa que están embarazadas, en el posparto o amamantando a menos que la liberación esté prohibida por la ley o que existan circunstancias excepcionales. Esto refleja nuestro compromiso de tratar a todas las personas con respeto y dignidad sin dejar de hacer cumplir las leyes de nuestra nación”.
La carveout para mujeres embarazadas y posparto puede ser parte de una flexibilización más amplia de las políticas de COVID-19 promulgadas bajo el expresidente Donald Trump que resultaron en la deportación rápida de la mayoría de los adultos solteros y algunas familias.
Según los informes, Biden está considerando poner fin a la llamada política del Título 42 de rechazar a muchos migrantes para evitar la propagación del coronavirus.
Los republicanos argumentan que las políticas de Biden son las culpables del aumento de la migración, una postura también adoptada por el presidente de Guatemala, así como por el presidente de México.
El número de detenciones en la frontera entre Estados Unidos y México alcanzó un máximo mensual de 21 años de más de 180.000 en mayo. Casi 179.000 personas fueron detenidas en abril y más de 173.000 fueron interceptadas en marzo.
Biden se afadó con la bienvenida a los solicitantes de asilo centroamericanos y está respaldando proyectos de ley para legalizar a la mayoría de los inmigrantes ilegales. Canceló la construcción del muro fronterizo entre Estados Unidos y México de Trump y puso fin a su política de “Permanecer en México”,que requería que los centroamericanos permanecieran en México mientras los tribunales estadounidenses revisaban las denuncias de persecución.
Biden también eliminó una regla de 2019 que prohibía a los inmigrantes que se considera que requieren asistencia social, impulsó un límite de admisión de refugiados y puso fin a la política de “tolerancia cero” del Departamento de Justicia de 2018 de procesar todos los cruces fronterizos ilegales.