Desde que inició la pandemia, ha sido mucha la información que se ha viralizado en cuanto al coronavirus y sus síntomas. La perdida de gusto y olfato, es uno de ellos y el más común en porcentaje de la población contagiada.
La pérdida del sentido del olfato -o anosmia– era una afección relativamente desconocida. Ahora forma parte clave del diagnóstico del COVID-19. El porcentaje exacto de personas que experimentan la pérdida del olfato varía según los estudios, pero la mayoría de las investigaciones consideran que es un efecto secundario común. Algunos pueden incluso experimentar la pérdida de la quemestesis -sensibilidad de la piel y la mucosa, por ejemplo, en la lengua-.
Para entender un poco más sobre este síntoma, nuestro equipo audiovisual entrevistó a la doctora Teolinda Mendoza, para abordar un poco más sobre este tema.