Ramil, un leopardo de las nieves de 9 años de edad del Zoológico de San Diego, ha dado positivo en la prueba del coronavirus, según anunció la organización.
El personal del zoo analizó por primera vez las heces del animal en busca del virus después de notar el jueves que tenía tos y goteo nasal.
Cuando el resultado fue positivo, el equipo de atención a los animales salvajes envió las muestras al Sistema de Laboratorios de Salud Animal y Seguridad Alimentaria de California para que el laboratorio estatal confirmara el resultado, lo cual sucedió.
Y aunque el zoo sigue esperando a que un laboratorio del Departamento de Agricultura de Estados Unidos compruebe por triplicado el resultado, espera que esa muestra también dé positivo, según un portavoz.
En un comunicado, el zoo afirma que los cuidadores están vigilando de cerca a Ramil y que sus síntomas no han progresado.
Dado que comparte recinto con una leopardo de las nieves y dos leopardos de Amur, el personal supone que los otros tres grandes felinos han estado expuestos y los ha puesto en cuarentena, lo que significa que la exposición estará cerrada al público.
“Podemos asegurar que el leopardo de las nieves y los leopardos de Amur que comparten su hábitat están recibiendo excelentes cuidados”, dijo Dwight Scott, director ejecutivo del zoo, en un comunicado.
El zoo dice que no está claro cómo se expuso el leopardo de las nieves al virus, y señala que los cuidadores tienen que seguir estrictos protocolos de seguridad y que a todos los empleados se les ofrecen máscaras N95, y que es obligatorio cubrirse la cara para cualquiera que no esté vacunado.
A pesar de estos protocolos, el Safari Park informó a mediados de enero de que su tropa de ocho gorilas había dado positivo en las pruebas de COVID-19, probablemente tras el contacto con un cuidador que tenía el virus pero no mostraba síntomas.
La tropa de gorilas, que se ha recuperado desde entonces, se convirtió en el primer ejemplo conocido de infección por el virus en simios. Pero los investigadores saben desde hace tiempo que los gatos pueden contraer el COVID-19.
En abril de 2020, un tigre del zoo del Bronx se convirtió en el primer caso de un animal que dio positivo por el coronavirus. Desde entonces, los investigadores han detectado en ocasiones infecciones en leones y gatos domésticos, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
La mayoría de los casos han sido leves, pero hay poco margen de error cuando se trata de especies en peligro de extinción. Según la World Wildlife Federation, solo quedan entre 4000 y 6500 leopardos de las nieves en libertad, y solo 90 leopardos de Amur.
A principios de este año, el zoo recibió un lote de una vacuna experimental de Zoetis, una empresa de salud animal que antes formaba parte de Pfizer.
El personal administró las vacunas a varios orangutanes y bonobos del zoo, y está repartiendo dosis a otras especies con riesgo de contraer el COVID-19, incluidos varios primates y felinos. Pero el leopardo de las nieves no había sido vacunado antes de su infección.
La noticia llega en un momento en que el coronavirus se está extendiendo ampliamente por la región. Las autoridades del condado de San Diego informaron el viernes de 1264 nuevos casos de coronavirus, el nivel más alto desde el 5 de febrero.
Es probable que gran parte de esa propagación esté impulsada por la variante Delta, una cepa que se calcula que es dos veces más transmisible que la versión original del virus que se vio por primera vez en Wuhan, China. Se sospecha que un 75 por ciento o más de las nuevas infecciones en California están causadas por esta cepa, según datos recientes de secuenciación.
Un portavoz del zoológico dijo que la organización aún no sabe si Ramil se infectó con la variante Delta. Por el momento, el zoo no tiene previsto cambiar sus protocolos de seguridad actuales y seguirá recomendando a los visitantes no vacunados que lleven mascarillas, sin que se vuelva a imponer un mandato.