Senadores del Partido Acción Nacional (PAN) denunciaron este lunes que los Gobiernos federal y de la Ciudad de México contrataron a 585 médicos cubanos que no contaban con título universitario para atender a pacientes covid-19 en México.
En su cuenta de Twitter oficial, Julen Rementería, coordinador panista en el Senado mexicano, reveló varios documentos que obtuvo de fuentes oficiales, en los que se menciona que el Gobierno de la Ciudad de México habría contratado 585 médicos para apoyar en la pandemia, quienes, supuestamente, no cuentan con un título que respalde su experiencia.
Por la tarde, la Secretaría de Salud capitalina (Sedesa) aclaró en un comunicado que los 585 médicos cubanos estaban acreditados por el Ministerio de Salud de la isla en áreas como epidemiología, medicina general integral, medicina crítica, biomedicina, enfermería general y enfermería especializada.
DETALLA INVESTIGACIÓN
Rementería señaló que preguntó a seis dependencias públicas, a través de solicitudes de información, algunos datos que le permitieran conocer la capacidad profesional de los médicos cubanos contratados por México para afrontar la batalla contra la covid-19 en 2020.
De acuerdo con los datos expuestos, tanto el Gobierno federal como el capitalino habrían gastado poco más de 255,87 millones de pesos (unos 12,7 millones de dólares) en la contratación de los especialistas.
Según los documentos, la Secretaría de Bienestar, a través de un convenio de colaboración, habría transferido el 21 de abril de 2020 más de 135 millones de pesos (6,74 millones de dólares) al Gobierno federal para ayudar en la crisis de la covid-19.
Mientras que solo 3 días después, el 23 de abril, la jefa de Gobierno de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, firmó con el régimen cubano, encabezado por Miguel Díaz-Canel, dos convenios bianuales por un total de más de 255,87 millones de pesos (12,69 millones de dólares).
Aseguró que en ese convenio, el Ministerio de Salud de Cuba se comprometió a “garantizar que el personal enviado a México tiene total capacidad y experiencia”.
Sin embargo, explicó que al solicitar información de los médicos contratados, instituciones como el Instituto Mexicano del Seguro Social y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) no pudieron otorgar datos, por lo que concluyó que los profesionales de la salud eran “falsos”.
También denunció que la Comisión Nacional de Arbitraje Médico (Conamed) permitió que “extranjeros sin título médico ejercieron de manera oficial funciones de salud en México”.
Y acusó al Instituto Nacional de Migración (INM) de dejar entrar a 585 personas, “sin saber quiénes son, ni a qué vienen”.
El panista afirmó que con esta investigación “se comprueba” que se orquestó un “fraude” al erario público por cientos de millones de pesos.
Finalmente, pidió a las autoridades de salud que proporcionen los expedientes de los pacientes a quienes trataron estos “falsos médicos” y saber cuántos mexicanos murieron “por culpa de este fraude” además de que se indemnice a familiares y los responsables respondan ante la ley.
En abril de 2020, el secretario de Salud de México, Jorge Alcocer, firmó un acuerdo que autorizaba a los Gobiernos locales a “contratar personal profesional de la salud con formación en el extranjero” mientras duraba la pandemia del coronavirus.
La decisión levantó controversia en el país debido al costo por los servicios de los médicos y por las actividades que realizarían.
En diciembre de ese año, la alcaldesa capitalina, Claudia Sheinbaum, anunció que 500 médicos cubanos habían llegado a la Ciudad de México para apoyar en la pandemia en la capital mexicana, que en ese momento vivía el apogeo de la segunda ola de contagios.
Meses antes, durante la primera ola de la pandemia, también se anunció el arribo de centenares de médicos cubanos.
Con información de EFE