Monica Lewinsky ha reflexionado sobre los problemas de salud mental a las que se enfrentó en la década de los noventa en medio del escándalo que rodeó su aventura con el entonces presidente Bill Clinton cuando tenía poco más de 20 años. La ahora activista y exbecaria de la Casa Blanca de 48 años se ha sincerado en una entrevista para el podcast The Axe Files publicado este jueves por el canal de televisión estadounidense CNN. La investigación sobre el escándalo, que condujo al proceso de impeachment de Clinton, le hizo tener “ideas suicidas” a raíz de su estallido en 1998.
Por El País
“No podía ver una salida. Y pensé que tal vez esa era la solución”, ha asegurado ante el asombro de su entrevistador, el comentarista David Axelrod. Lewinsky ha confesado que llegó a preguntar “¿qué pasaría si muriera?” a los abogados que trabajaban para el entonces juez estadounidense Kenneth Starr. En su reflexión actual, la activista se pregunta el por qué de la inexistencia de un protocolo que hubiera podido aportar luz en su situación. “Ese es un punto en el que se supone que debes traer a un psicólogo o, ya sabes, algo”, ha añadido.
Los comentarios de Lewinsky se producen tras el estreno en EEUU de la serie Impeachment: American Crime Story, una nueva dramatización del caso Lewinsky en la que se cuenta el escándalo sexual de Bill Clinton, que casi le costó la presidencia, desde el punto de vista de la exbecaria. Una serie que llegará a España a través de La Sexta, pero cuya fecha es todavía desconocida.
Lewinsky ha concluido su confesión asegurando que, a pesar de todo, tuvo suerte: “Creo que mucha gente que ha tenido estas ideas suicidas se encuentra en un momento en el que… siente una revelación, ya sabes, como dos caminos que se separan en un bosque”, ha explicado. “Pero entonces, el psiquiatra forense me cogió el teléfono. Y así es como fui bastante, bastante afortunada”.
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