Diecisiete empleados de un distrito escolar de Florida han muerto por COVID-19 desde el comienzo del año escolar en agosto, informaron este miércoles las autoridades.
Doce de los diecisiete empleados que fallecieron en el condado de Polk habían regresado a sus puestos de trabajo en las escuelas públicas cuando comenzó el año escolar el 10 de agosto, dijo Kyle Kennedy, portavoz del distrito.
Los otro cinco no se presentaron a sus empleos este año escolar.
El distrito desconoce cómo contrajeron el virus, afirmó Kennedy.
“La pandemia sigue afectando gravemente a nuestra comunidad, y muchos servidores públicos, incluidos educadores, personal sanitario, personal de rescate y agentes de la ley, están sufriendo pérdidas trágicas”, lamentó el distrito en un comunicado.
“Cada muerte es un golpe devastador para nuestra comunidad y refuerza la necesidad de que todas las personas sigan tomando precauciones para reducir la propagación de la enfermedad”, añadió.
El condado de Polk está en el centro de Florida, entre Tampa y Orlando, e incluye las ciudades de Lakeland y Winter Haven. Su sistema escolar está entre los 30 más grandes del país y atiende a unos 106,000 estudiantes, según el sitio web del distrito. Kennedy indicó que cuenta con unos 14,000 empleados.
Según las cuentas oficiales de COVID-19 del distrito, hasta el 23 de agosto, se habían confirmado un total de 3,855 casos positivos en el sistema escolar, que incluye a 3,424 estudiantes y 431 empleados.
Desde el 23 de agosto, 21,536 personas han sido puestas en cuarentena a causa del virus, lo que abarca a 20,979 estudiantes y 557 funcionarios, según el informe del distrito.
Las mascarillas son opcionales para los estudiantes y el personal del distrito, explicó Kennedy. El gobernador Ron DeSantis ha prohibido los mandatos de máscaras en el estado y ha amenazado con penalizar a los distritos que intenten hacer cumplir el uso de cubrebocas.
Lynn Wilson, del consejo escolar, dijo a la estación WFLA en Tampa, afiliada de nuestra cadena hermana NBC News: “Es una tragedia terrible, realmente lo es”.
“Nuestras manos están atadas”, aseveró Wilson. “La realidad es que no se puede hacer cumplir una política de mascarillas. Sé que mucha gente la quería. Creo que la verdadera meta era permitir una opción de enseñanza virtual y tampoco pudimos hacerlo”, reconoció.
La prohibición de los mandatos de mascarillas obligatorias todavía se está abriendo paso a través de los tribunales. Un juez que dictaminó hace un mes que el estado debe dejar de aplicar inmediatamente la propuesta de DeSantis, solo para que un tribunal de apelación diga días después que se puede aceptar mientras se impugna.
Las escuelas públicas del condado de Polk tienen purificadores de aire en cada aula, informó WFLA. También está instalando 50,000 protectores de escritorio en las escuelas primarias. El proyecto debería estar terminado en noviembre, afirmó el distrito en un comunicado.
“Utilizando fondos federales, estamos implementando esta medida de seguridad adicional para ayudar a proteger a nuestros estudiantes de primaria K-5, que a menudo trabajan en estrecha cercanía entre sí y no son actualmente elegibles para las vacunas contra el COVID-19”, aseguró.